1. Una deliciosa y naciente navidad


    Fecha: 02/04/2018, Categorías: Incesto Autor: MadeInChile, Fuente: SexoSinTabues

    ... nerviosas. Acerqué mi boca y empecé morder con delicadeza, mis dedos se infiltraron entre su piel y el elástico de su bóxer para empezar a hacerlo descender y dejar a clara vista aquel hermoso miembro, venoso, duro completamente, solo quería mamarlo, lamerlo, sentir su sabor. -Hermanito, seré una buena hermana – con la diestra empecé a masturbarlo hasta dejar su glande a la vista- te haré sentir bien – le decía con ternura romántica casi ilegal. Estaba hirviendo su pene, pero, se sentía bien masturbarlo, era ideal, cabía sin problemas en mis manos y quedaba bastante libre. Primero, lamí su glande rápidamente, lo miré hacia arriba y le sonreí para luego, separar mis labios e introducir su pene en mí: aún recuerdo su sabor, aún recuerdo su calor, aún recuerdo su dureza, aún recuerdo el momento en que por primera vez mamaba el pene de mi hermano. Empecé a mamarlo como siempre había sabido: masajear el glande con la lengua, presionar el cuerpo con los labios, succionar cada vez que mi cabeza fuese en dirección opuesta a su cuerpo y masturbar con mi mano. Sentí sus manos hacer presión a mi cabeza, sentí ...
    ... su pene hacerse un poco más grande, sentí su voz gemir profundamente, sentí su bombeo, sentí su semen llenarme la boca en cada rincón, sentí como ese cálido líquido me explotaba en la lengua e impregnaba de su salado sabor cada lugar, cada centímetro de mi paladar, sentí como su semen recorría mi garganta mientras me lo tragaba. No solté su pene hasta que la última gota de semen salió, tragué todo su salado, su delicioso semen, de mi hermano. Se separó de mí y apoyó su cuerpo a la pared: estaba el semi desnudo, con los pantalones abajo, el pene semi erecto al aire y yo, de rodillas, aún húmeda, con gotas de semen en mis labios, mirándonos, respirado agitadamente. Los minutos pasaron, volvimos al patio y la noche continuó tal cual la habíamos dejado, excepto que desde esa noche, esa noche a mis 17, despertó mi apetito por el incesto. Espero que este, mi primer relato verídico les haya gustado. Hace tiempo me debatía entre si escribir o no mis sucesos hasta que encontré esta página que parece ser muy respetable entre los usuarios . En fin, si les gusta y quieren seguirme leyendo, pues, agradecida estaré. 
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