1. El arte de mi hijo


    Fecha: 20/04/2025, Categorías: Incesto Autor: arfadax, Fuente: TodoRelatos

    ... momento contigo, la persona más importante de mi vida.
    
    - “Pero, Javi, eso estuvo mal. ¿No lo ves? Tener sexo con mi propio hijo, eso sería incesto.”
    
    - “No lo haremos solo por sexo, mamá. Lo haremos por algo más grande que eso.”
    
    Me dolía la cabeza. Javi casi sonaba lógico y comenzaba a dar sentido a una situación sin sentido.
    
    - “Javi, es suficiente. La respuesta es No. La respuesta siempre será No.”
    
    - “Siempre he querido un hermano o una hermana. ¿No tengo derecho a opinar?”
    
    - “Javi, ese hermano o hermana también sería nuestro hijo o hija. ¿Estas preparado para ser padre? Piénsalo.”
    
    - “No podría estar más preparado si no es contigo, mamá. Eres la única persona en la que confiaría con llevar en su vientre a mi hijo. Eres la única mujer que podría brindarle el amor, el cuidado y el consuelo que necesitaría por el resto de su vida. Justo como a mí me lo has dado.”
    
    Mi corazón se derritió y extendí mis brazos. Javi se acurrucó y apoyó su cabeza. Luego me miró y me besó los labios.
    
    - “¡Javi!”
    
    - “Ahora llegamos al otro motivo”. Levantó la libreta de bocetos. “Tengo una de las madres más bellas y sexys del planeta. Mamá, tienes ese gran cuerpo con ese hermoso rostro. De pronto, te vi no solo como mi madre, sino como mujer. Una mujer que necesita del amor y la atención que no ha estado recibiendo durante años.”
    
    - Jovencito, no te corresponde hablar con tu madre sobre-
    
    Javi me interrumpió agitando el cuaderno de bocetos.
    
    - Dime que no sientes lo ...
    ... mismo. Dime que ahora no me miras con diferentes ojos a como lo hacías antes.
    
    - Estás hablando como un desquiciado y no escucharé más de eso.
    
    Abrió el dibujo de los dos penes.
    
    - No es demasiado difícil adivinar qué es esto, mamá. Me has visto muy bien la polla hoy. Vi la mirada en tu rostro. No podías quitarle los ojos de encima cuando la comparaste con tu muñeca. Te afectó de alguna manera y respondiste de manera natural a eso. Me excite por ti hoy. Admítelo, tú también te excitaste por mí.
    
    - ¡Suficiente! - Respondí.
    
    - El otro es el de papá, ¿verdad?
    
    - ¿Y si lo es qué?
    
    - Dibujaste esto para comparar, ¿no? Lo dibujaste y probablemente enumeraste todas las diferencias. Probablemente fantaseaste con cómo me sentiría dentro de ti. Cómo se sentiría si realmente lo hiciéramos.
    
    - ¡Javi, te ruego que detengas esto!
    
    Tenía tanta razón. Era como si hubiera leído mi mente.
    
    - “Dime mamá” Volvió a levantar la foto, “¿Cuál de estos puede darte lo que quieres?"
    
    - “No. No. No lo hagas.”
    
    Mi mente estaba dando vueltas. No podía soportar la tensión por mucho más tiempo. Pero Javi siguió adelante.
    
    - ¿Cuál, mamá? ¿Cuál definitivamente puede darte un hijo?
    
    Una voz lejana susurró,
    
    - "La Tuya". La voz era mía.
    
    - ¿Y cuál podría hacer que te corras, mamá?
    
    - Javi, ¿no tienes vergüenza?
    
    - “Mira estos otros dibujos que hiciste. Mira este primero” Lo sostuvo frente a mí.
    
    Era mi perfil del cuello para arriba. Frente a mí había un cuerpo delgado y ...