Dieciochoañeras muy cañeras
Fecha: 22/12/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: Oxcar, Fuente: CuentoRelatos
... lado, en la postura típica, yo arriba y ella abajo, y por fin a cuatro patas. Se la saqué con intención de metérsela por el culo... mmm cómo me ponía esa idea. La agarré del pelo y la atraje hacia mí para besarla dulcemente, mientras la susurraba que se la iba a meter por el culo muy despacito y que iba a disfrutar... —No tío, por el culo no... que me vas a hacer daño y me va a doler, nunca me han follado el culo. Su rostro asustado... se calmó con mis palabras, comencé mientras me frotaba contra su clítoris para que mi mástil siguiese en pie a meter el dedo índice lentamente... y saqué el lubricante que suelo usar cuando yo me masturbo con mis consoladores, un lubricante que no es ni vaselina ni nada que pueda joder el látex de los condones. El lubricante estaba helado, lo cual le gustó, puse un poquito en la puntita de su ano, y lentamente fui introduciendo mi miembro hasta su total longitud, mientras acariciaba y besaba su espalda, eso hizo que le doliera menos, pero como siempre como cualquier primera vez que te la meten por el culo, duele (y sí... sí lo sé... ). Ella cambió su rostro de miedo y algo de dolor al momento por una cara de placer enorme, decidí meterle mi consolador naranja por el coño a la vez que la enculaba, puse un condón en mi consolador, como regla principal cuando se va a usar un juguete así por dos personas distintas. (Olvidar eso que os enseñaron de pequeñitos acerca de que era bueno compartir vuestros juguetes con los demás niños/as). Mis ...
... embestidas a su culo aumentaron de ritmo cuando sentí que ya no podía más y que mi corrida era inminente la avisé... como siempre suelo hacer. —Sylvia me voy a correr tíaaa, me voy a correr... ¡esto es la hostiaaa sí! Sylvia se dio la vuelta y delante de mí me gritó: —Dame tu leche... dámela toda... échamela en la cara y en la boca... Me quite el condón y me encontré a Sylvia con los ojos abiertos y la lengua fuera esperando mi corrida que no tardó en llegar, un potente chorro de semen, cuatro trallazos para ser exactos, impactaron en sus ojos, cerrándoselo por efecto instantáneo de mi corrida, los mofletes y por supuesto su lengua que recibió una abundante ración de semen, el semen se cayó por su barbilla hasta sus pechos, y el resto lo esparció por el lateral de su cara mezclado con su saliva, no se lo tragó porque no le gustaba tragárselo cosa que me confesaría más tarde... su cara quedó cubierta de semen, mientras se tumbaba en mi pecho, y me contaba lo mucho que había disfrutado, mientras con un kleneex limpiaba mi lefa de su cara, me dijo: —Me ha encantado que me desvirgaras el culo. En el salón seguían Leti y Judith, una vez más tranquilos tomamos una nueva copa, yo me había tomado tres cubatas y estaba de puta madre pero ellas se habían tomado cuatro copas y estaban un pelín borrachas, Leti y Judith todavía estaban calientes, yo me entretuve con recoger un poco aquello, al final decidimos hacer un concurso... puesto que mis tres queridas amigas me preguntaron que quién era la ...