Dieciochoañeras muy cañeras
Fecha: 22/12/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: Oxcar, Fuente: CuentoRelatos
Diciembre del año 2000, estábamos un año más en las fiestas Navideñas, la verdad es que detesto las putas navidades, porque parece como si hubiese que ser feliz a la fuerza, no sé, el caso es que desde que me dejó mi novia en primavera no andaba yo muy fino de ánimos a excepción de algún capricho que me había dado follándome a alguna chica que había conocido en los Clubs Góticos de siniestrillas que frecuento, si las chicas góticas del Dark Hole y el 666 son unas buenas putillas viciosas. Me encontraba en el Corte Inglés de Castellana, haciendo tiempo pues quizás esa noche iría al Dark Hole a tomar un par de copas y a escuchar algo de música, a bailar un poco, a entrarle a alguna siniestra... en fin, lo que fuese surgiendo a través de la noche ya que me gusta improvisar. Llevo por aquí un buen rato mirando todas aquellas cosas que creo que tardaré muchísimo tiempo en tener, ropa cara, DVD´s, un bajo eléctrico, un buen sintetizador así que mi visita termina en la sección de discos, escuchando la música de los discos disponibles para escuchar, las últimas novedades, etc. Me compro una recopilación de música de baile, ya sabéis lo típico, una recopilación de 4 cd´s con varias sesiones de house, techno, dance y progressive. Me impresiona la dependienta que me atiende una rubia imponente de no más de 25 años... que hace que me ponga caliente y mi cabeza empiece a pensar cosas "educativas". Las dependientas del Corte Inglés o de cualquier almacén con esas faldas, medias, zapatos ya ...
... fuesen jóvenes o maduras siempre y cuando estuviesen de buen ver, siempre han provocado en mi un "morbo incendiario" de considerables dimensiones. Después de pagar los tres talegos que me han costado los cd´s (Papa Noel este año se ha portado bien...). Salgo en busca de mi coche que lo he dejado en una de las calles de atrás más que nada porque aquí en el parking cada media hora que tienes el coche metido te pegan cada sablazo... y muchas veces ni si quiera compras nada, pero el atraco del parking nunca falla por eso ya nunca lo meto allí. Aunque fue bastante difícil encontrar aparcamiento en esta macro-zona de Azca, centros comerciales, oficinas... más aún si cabe debido a estas peculiares fechas navideñas. Al salir hay en un banco tres jovencitas a las que no echo más de 18 años, me atrae a la vista la que está sentada a la derecha, es altísima, quizás más que yo que a mis 21 años, mido aproximadamente 1,85, están preparadas para salir de fiesta, faldita corta y las botas altas, madre mía qué combinación, las botas altas de tacón en color crema, moradas de látex o algún material similar y la otra chica las lleva negras de terciopelo... la verdad es que siempre que paso por Alonso Martínez o Moncloa y ver a lo largo de la noche a unas mil tías con botas de ese estilo provoca en mí que al llegar a casa ya metido en la cama, unas veces cargado con más "sangre en mi alcohol" que otras, en ocasiones me he hecho pajas verdaderamente antológicas, además son las más satisfactorias ...