Necesito consejo
Fecha: 11/08/2019,
Categorías:
Infidelidad
Hetero
Autor: AMorboso, Fuente: CuentoRelatos
... emitía un gemido de molestia. En ese momento, sentí que venía mi orgasmo sin que pudiese contenerme. Intenté sacarla para correrme fuera, pero el primer chorro quedó dentro y el segundo en el recorrido de salida, quedando el resto sobre el bello de su pubis. Me dejé caer a su lado para seguir acariciándola y hacerle alcanzar su placer, pero retiró mis manos, me dio un beso y se levantó, recogiendo la prenda que había dejado en la cama y me dijo. -Cariño, estoy muy feliz de ser tu esposa. Voy a lavarme. Ahora vuelvo. Luego, al día siguiente, viaje de novios de noche, llegada de madrugada y cansados, al otro día tengo molestias, etc. No volvimos repetir hasta cuatro días después. A pesar de todo, todas las noches acariciaba su cuerpo, consiguiendo que me permitiese besar y acariciar sus pechos y pasar mi mano por su coño con suavidad, hasta conseguir que se mojase. Por eso, a la cuarta noche, fue ella la que me pidió la repetición. Luego siguieron años de casi una vez por semana y poco a poco, se fue alargando hasta casi una vez cada quince días o un mes si coincidía con la regla. No hemos tenido hijos. Ella nunca ha querido que nos hiciésemos pruebas. Imagino por miedo a que la repudiase si era ella la culpable. Manías como la de la prenda blanca en la cama para recoger la sangre de su virginidad y así no poder decir que no era virgen o que nuestro matrimonio no se había consumado. Creo que son historias de mi suegra. Siempre hemos hecho el amor en la postura del misionero, ...
... nunca sexo oral o anal. Como mucho, hemos llegado a hacer el amor con una lamparita encendida. Siempre sábado noche. No por la mañana, no por la tarde, no en el sofá, no en la mesa, no de pie, no en la ducha... Pero la quiero y nunca se me ha vuelto a ocurrir el ir de putas, ni siquiera tener una aventura con otra. Hace poco, vimos una película de la historia de amor de un matrimonio durante toda su vida. Por la noche, en la cama, mi mujer me preguntó si yo estaba feliz con nuestro matrimonio o me hubiese gustado estar casado con otra mujer, a lo que respondí que sí y no. Si porque la convivencia con ella era maravillosa, llenaba mi vida de amor y que creía que no podría encontrar otra mujer mejor. -¿Entonces, cuál es la parte que no te gusta? -El sexo. -¿El sexo? Yo pensaba que disfrutabas. -Sí, pero el sexo es algo más. Es imaginación, es variaciones, es experimentar posiciones y nuevas formas de placer. Lo nuestro es aburrido, es… como una masturbación. La conversación duró mucho tiempo. Luego hicimos el amor, pero con una variación: conseguí que ella se colocase encima. El poder controlar los movimientos y roces con sus puntos de placer, le hizo alcanzar dos orgasmos antes de que yo me derramase junto a ella en un tercero. Cayó rendida sobre mí, mientras yo acariciaba su espalda y culo. -¿Crees que aún estamos a tiempo de disfrutar? –Me preguntó cuándo se recuperó. -Yo cada vez tengo menos potencia, pero creo que todavía nos quedan algunos años para disfrutar, si quieres. ...