Amalia en Benidorm
Fecha: 21/08/2018,
Categorías:
Infidelidad
Autor: murgis, Fuente: CuentoRelatos
Amalia mi mujer le encantaba la forma que tenía Rafael de follarsela, tenía una buena herramienta y dice que cuando la tenía dentro la movía que parecía una batidora, a mí me dijo él que tenía unos días de vacaciones y que si no me importaba que se fuera mi mujer con él, y ella me dijo lo mismo que quería darle alegría a su coño, que yo buscara algún agujero si quería follar y quedaron para el jueves por la noche porque yo tenía que ir de viaje y mi mujer lo invito a que esa noche se fuera a casa ya para follar, a la mañana siguiente preparo una pequeña maleta en la cual puso dos cambios de ropa, un atrévete muy sugerente y una bata que no era más larga que el atrévete, pues deseaba lucir atractiva y sensual para Rafael, y el viernes se fueron a la estación del AVE . Salieron el viernes por la mañana llegando a Benidorm como a las 8 de la noche, Rafael, su amigo, ya había reservado el hotel, por lo que al llegar a la estación se subieron a un taxi que los condujo al hotel, después de dejar su equipaje en la habitación bajaron a cenar al restaurante del hotel, una vez que terminaron de cenar regresaron a su habitación, pues ya no era hora como para salir a pasear, además los dos deseaban estar ya en la cama. Ya en la habitación comenzaron a desempacar y luego mi esposa se dirigió al baño para ponerse su atrévete y dirigirse a la cama, en la cual ya se encontraba acostado Rafael, pues el solo se había despojado del pantalón y la camisa, pero cuando vio a mi esposa salir con su ...
... batita que apenas le llegaba dos dedos abajo del nacimiento de las nalgas, se incorporó para admirarla y se sorprendió aún más cuando ella se despojó de la bata quedando con solo el atrévete de tela transparente y un breve tanga Rafael dejó de ver la televisión para centrar su atención en mi esposa, quien no se metió a la cama, solo se quedó sentada en la orilla para hablar un poco con Rafael respecto a lo que harían al día siguiente, determinaron que harían un recorrido por los principales lugares de atracción y por la noche irían a bailar. Ya que terminaron de hablar lo que harían al día siguiente, Rafael invito a mi esposa a meterse entre las sábanas para que vieran un rato la televisión juntos, mi esposa accedió y se acomodó junto a él, quien la abrazó para hacer que descansara su cabeza en su pecho, mientras veían la televisión el comenzó a tocar las tetas, para luego con la otra mano comenzar a tocar por sobre la delgada tela de la tanga, los pelos y la pipa de mi mujer, quien se dejó tocar sin protestar y luego ella introdujo su mano dentro de los calzoncillos de Rafael para sentir que la polla ya comenzaba a crecer, por lo que ella comenzó a frotarla para que siguiera creciendo, hasta que sintió que ya estaba lista y entonces se acomodó para besarla, despojando a Rafael del calzoncillo y despojándose ella de su atrevete. Mi mujer empezó a lamer la gruesa polla de Rafael mientras él le acariciaba las nalgas, y le metía un dedo en el coño, notando lo húmeda que estaba. ...