Al Servicio del Sultán 3
Fecha: 17/03/2025,
Categorías:
Dominación / BDSM,
Autor: jessmartin, Fuente: TodoRelatos
... mueva, como esperaba es una sensación desconocida para ella, que a pesar de intentar resistirse estalla en un nuevo orgasmo.
Como ya hemos hecho con Merary y con Jimena, Yaritza y yo podríamos tirarnos horas con este pequeño juego, pero ya no puedo esperar más para follarme a Maira, y cuando siento que está cerca de un nuevo orgasmo miro a Yaritza y la hago un gesto, que inmediatamente agarra la cabeza de la princesa sujetándola contra su coño y se deja ir en el orgasmo.
Me siento en las almohadas, y Yaritza ayuda a Maira a arrodillarse ante mí.
“¡Por favor fóllame!” vuelve a suplicarme está vez sin ningún rastro de vergüenza en su rostro.
“¿Por qué tendría que follarte?” le pregunto. “¿Quién eres tú? ¿Por qué necesitas que te fóllen?”
Ahora sí Maira vuelve a agachar la mirada avergonzada, resistiéndose con todas sus fuerzas a lo que sabe que tiene que decir para que me la fólle.
“Soy una esclava;” me dice finalmente. “Necesito que me fólles para ser tu esclava, y porque quiero sentir tu polla en mi coño;” añade con lágrimas en los ojos.
En estos meses junto a Hafel y Moussa he aprendido mucho sobre cómo tratar a las esclavas, sobre todo a las esclavas nuevas, si te las fóllas por detrás, sin mirarlas a la cara, las quitas su identidad, nada las diferencia de cualquiera de las otras esclavas y hacen cualquier cosa para llamar tu atención, convirtiéndose en las esclavas más sumisas y complacientes. De esta forma me follé tanto a Jimena como a Merary y ha ...
... funcionado de esa manera.
“Si tu nueva esclava es rebelde y con espíritu luchador oblígala a que sea ella quien se lleve tu polla a su coño;” me explicó Moussa, “Haz que te mire a los ojos mientras lo hace;” me comentó Hafel. “Si eso no la rompe, mejor líbrate ella, te apuñalará en cuanto tenga ocasión;” añadieron los dos al unísono.
Yaritza y Merary ayudan a Maira a colocarse encima de mí, sujetando su cuerpo mientras desciende lentamente, posicionando la punta de mi polla a la entrada de su húmedo coño. Suelta un pequeño gemido cuando mi polla comienza a abrir y estirar su coño, y se detiene cuando la siente contra su himen. Siguiendo las indicaciones que Yaritza le susurra al oído, Maira levanta ligeramente su cuerpo dejándose caer de golpe, soltando un grito cuando mi polla rompe su virginidad y se introduce casi en su totalidad en su coño.
A partir de ahí todo le resulta más fácil, al principio ayudada por las dos esclavas, pero luego ya en solitario, comienza a subir y bajar sobre mi polla, llevándola cada vez más profundo con cada movimiento, sin detenerse ni siquiera mientras llega a un orgasmo tras otro hasta tener su cuerpo sentado sobre mi vientre. Después del tercer orgasmo gracias a mi polla, Maira cae desplomada sobre mi pecho y me mira feliz por los orgasmos y porque todo haya acabado.
Agarrando su cara le doy un beso y la sonrio, pero luego le digo algo que sé que no le va a gustar.
“Ahora voy a follarte el culo;” le digo haciendo una señal a las ...