Andre (parte 5)
Fecha: 23/11/2024,
Categorías:
Dominación / BDSM,
Autor: Montes Federico, Fuente: CuentoRelatos
Tal como habíamos arreglado con Andre y Alma, este finde nos vinimos para casa. Ya había preparado varias sorpresas para las chicas. Ni bien entramos a casa, serví una picada con tragos y nos sentamos en el living.
- “Chicas, les voy a pedir total sumisión para poder llevarlas a volar bien alto. Les voy a indicar cuales son sus roles y que tienen que hacer. Van a cambiar varias veces de lugar y de rol. Lo que nunca va a cambiar es que son mis sumisas y hacen todo lo que les digo. ¿Ok?”
- “Si papi. Andre ya me contó lo que le hiciste a ella cuando vino acá. Quiero eso yo también. Te voy a obedecer en todo”, dijo Alma.
- “¿Y si te ordeno que la obedezcas a Andre?, le pregunté a la rubia.
- “Si es tu orden, por supuesto”.
- ¿Y vos, Andre ¿la obedecerías a Alma si te digo”.
- “Por supuesto”.
- “Bueno, entonces empecemos. Desnúdensen. No creo que vuelvan a usar ropa hasta el domingo que se vayan”
Y los tres nos desvestimos. Después las llevé al cuarto que había preparado para ellas. Había un sillón revestido en cuerina separado medio metro de la pared y, en la misma varios ganchos, así como en el techo, sobre una mesa cercana había látigos de hule, esposas, vendas, mordazas, lubricantes, didlos, consoladores y otros “chiches”.
- “Chicas, Esta es la única vez que deciden ustedes. ¿cuál va a ser la primera que amordace y ate y a la cual le propine chirlos y caricias?”.
- “¿Podes empezar vos, Andre?”, pidió Alma.
- “Con todo placer mi amo”, dijo la ...
... morocha con una sonrisa.
- “Vos vas a ser mi ayudante Alma. Y no quiero que dudes. Hacé todo lo que te digo ¿está bien?”
- “Si papi”
Le fui pidiendo a Alma lo que necesitaba y procedí a colocarle a Andre la mordaza y la venda, las pulseras y a ponerla de rodillas en el sillón, la espalda hacia mí. Puse una soga rodeando el sillón a la cual até sus tobillos. Eso hacía que le quedaran bien abiertas las piernas, dejando tdo su sexo expuesto. La morocha permitía todo con ansia y deseo. Sabía que le esperaba. Cuando estuvo lista le puse unas orejeras que le impedían escuchar.
Puse una música sensual de fondo. Cuando estuvo lista, le dí a Alma un aceite de romero y le indiqué que se lo pase por el cuerpo y después la acaricie toda y le recalqué “toda”. Cuando empezó a hacerlo, me puse detrás de ella y la empecé a aceitar a ella y le dije que le hiciera a su amiga lo que yo le hacía a ella. Empecé por masajearle todo el cuerpo incluídas sus tetas, su cola, su conchita y su culito. Cuando empezó a aflojarse, le dí un chirlo para después masajearle la nalga. La tomé a Alma del cabello, para obligarla a mirame y le dije.
- “Si no le das chirlos como yo a vos, te voy a castigar más duro. Repetí lo que hago ¿entendiste?
Asintió con la cabeza y le dio un buen chirlo a Andre para después masajearla. De ahí en adelante fue repitiendo lo que yo le hacía. La acariciaba, le daba un chirlo, le masajeaba la colita y la conchita, le apretaba las tetas mientras le daba besos en el ...