Una Nueva Puta en el Catálogo... es Profesora
Fecha: 29/10/2024,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: el Bardo, Fuente: TodoRelatos
... aliviadas.
Alonso: Eh... ¿segura que podrás caminar con esos tacos?-Carraspeó intentando mirar hacia otro lado, pero era difícil en ese cubículo de baño donde, quizás, las dos mujeres con las tetas naturales más enormes de Chile estaban.
La delgada muchacha de enormes tetas volvió a suspirar y tomó su abrigo para salir del cubículo e ir a retocarse el maquillaje. Ahí se quedaron profesora y alumno, con ella no pudiendo dejar de pensar en María Isabel y en ese saludo que se había dado con ese muchacho el miércoles pasado... quizás eran celos, aunque no estaba segura de eso.
Giselle: ¿Pasó algo entre María Isabel y tú?-El muchacho acusó el golpe, a quien las orejas se le tornaron coloradas inmediatamente.
Alonso: Tenía que sobrevivir en esa hacienda-Ella le sonríe y se acerca para acariciarle la mejilla.
Giselle: ¿Ves las cosas que puedes conseguir sin ser un patán?-Le abrió los ojos, como una madre que regaña a su hijo mientras ponía sus manos en su cintura, dando una imagen increíblemente sexy con ese abrigo abierto, esas enormes tetas al medio y ese antifaz en su mano izquierda- Fuiste un patán y te dejó una herida en el rostro, fuiste amable y te la culeaste.
“Uy, ese lenguaje, profesora...” se dijo Alonso, sorprendido.
Alonso: Yo...-Intentó articular alguna respuesta inteligente, pero solo balbuceó.
Giselle: Y Alonso, deja de mirarme las tetas, por favor-La mujer pasó al lado de su muchacho- Hoy no serán tuyas.
Alonso: ¿Está segura?-Ella ...
... soltó una carcajada en el mismo instante cuando escuchaban un grito algo furioso.
El muchacho, al salir del cubículo, vio como la puerta del primer cubículo se abría de golpe dando un fuerte portazo y Facundo iba directo a mirarse al espejo. Estaba rojo, rojo de ira y de nerviosismo.
Facundo: ¡No puedo con esta mierda!-Cristina hizo el amago de ir a ayudar a su muchachito, pero Giselle la tomó del brazo.
Giselle:Alonso, anda a ayudar a tu amigo, por favor-Alonso quiso responder, pero solo soltó un rezongo de muchachito regañado. Mientras, las mujeres volvían a concentrarse en los espejos para retocar sus maquillajes.
Alonso: Déjame a mí.
El muchacho se acercó a su obeso amigo y tomó el corbatín de seda negro que este no podía ajustarse en el cuello. El problema era el grueso cuello del gordo, además de su caricaturesca papada que cubría casi por completo ese corbatín. Alonso logró tomarlo y, con esfuerzo, consiguió abrocharlo. Ambos suspiraron aliviados.
Facundo: ¿Es necesario?-Alzó su frente para intentar mirar como quedaba- A las once de la noche habré muerto por asfixia.
Alonso: No exageres-Miró su teléfono, ya eran más de las siete de la tarde y María Isabel seguía sin responder.
Facundo:¿Tú no te vas a terminar de vestir?-Alonso chistó mientras ayudaba a su amigo a ponerse su saco.
Julia:¡Alonso, rápido!-Ambos amigos se sobresaltaron de ver a ese elegante rubia en el umbral de la puerta del baño- Llegó el furgón.
Facundo: ¿Le costó mucho ...