Un perfecto desconocido en la red - Relatos Eróticos

Un perfecto desconocido en la red

Ese viernes estaba sola en casa; Víctor para variar, andaba de viaje.Al anochecer estaba aburrida y comencé a chatear con un tipo en la red.Me hablaba en forma bastante seductora hasta que finalmente terminamos hablando abiertamente de sexo.Me preguntó qué era lo que realmente me gustaba de un hombre y le contesté sin vueltas: me gustaba que fuera bien macho y me cogiera bien.Entonces el tipo se transformó y me espetó con tono imperativo:“Estamos perdiendo el tiempo hablando por aquí; perra, si te interesa disfrutar de un verdadero macho, fíjate lo que tengo para vos…”Abrí la cámara de mi computadora y apareció ante mis ojos un tremendo pedazo descomunal de verga; venosa y bastante gruesa, que latía entre los dedos de ese hombre. Hacía rato que no veía una pija tan grande…“Con esta verga te voy a romper el culo bien roto y te lo voy a llenar de leche, putita…” Susurró mientras se la masajeaba con una mano.“Vamos puta, puedo tratarte como a una verdadera perra…”Su tono amenazante me hizo calentar mucho y sentí que me mojaba…Mientras yo miraba su verga me imaginaba como sería una embestida de esa cosa descomunal y me estaba volviendo loca de excitación y miedo: pensaba que me iba a desgarrar el culo si me animaba a entregárselo…“Perra; ya sé que estás bien caliente; así que vas a venir a mi departamento para que te rompa bien el culo con mi verga; entendiste?”Me dijo la dirección. Por casualidad quedaba apenas a diez cuadras de mi casa. Me puse una minifalda de jean, tacos ...

... altos y me maquillé a las apuradas. Mientras caminaba hacia la casa del desconocido, sentía la humedad de mi concha ya deslizándose entre mis muslos…Cuando llegué, me abrió la puerta al palier por el portero eléctrico:“Parece que estás muy desesperada, putita, viniste corriendo…”Subí con el ascensor hasta su departamento y toqué el timbre de la puerta.“Adelante, perra, está abierto… ya estoy listo para vos…”Era verdad. Ya estaba completamente desnudo y con su enorme verga erecta lista para atacarme. Era algo descomunal tal cual se lo veía en la pantalla de mi computadora. Era grueso, bastante largo y venoso…Temblé sin control mientras no dejaba de mirarlo.El tipo me ordenó que me desnudara y yo obedecí sin poder resistirme.Mis pezones erectos, delataron mi inocultable excitación…“Veo que ya estás lista para probar mi verga, puta… estás bien caliente”Deslicé mi pequeña tanga de algodón hasta mis tobillos y quedé desnuda frente a ese desconocido; que tenía una increíble pija, más grande de lo que jamás yo había visto…“Te voy a romper el culo ahora mismo…” Me dijo, ordenándome que me apoyara contra el respaldo de un sillón cercano, mientras él se acercaba con un pote de vaselina en sus manos…Obedecí como extasiada y me arrodillé en el sillón, ofreciendo mi cola.Sus dedos me aplicaron vaselina en mi entrada trasera, con algo de torpeza. Luego dos de sus dedos se hundieron profundamente en mi cavidad anal, hasta el fondo, llenos también de vaselina…Entonces se ubicó detrás de mí y ...