Deosamo: Mala Jornada
Fecha: 31/12/2017,
Categorías:
Control mental,
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... con esmero. No lo hagas.No estaba convencida del todo.No lo hagas.Ella se detuvo. Su inseguridad fue remplazada por la seguridad. La voz tenía esa influencia sobre ella.No fue nada y lo sabes. Si, lo sé,reflexionó. Era extraordinario como su mente le ayudaba a razonar las cosas, como todo lo que señalaba tenía sentido. Tienes hambre. Entonces su estómago gruño. Ella no había comido nada desde el desayuno, no recordaba bien que había sido. Se había saltado el almuerzo para ponerse al día con los informes atrasados y cerrarle el hocico a Sanders.Necesitas una ducha.La necesitaba. Sabía que su cuerpo estaba sucio por el trabajo, pero mayormente por la excitación y sudor que emergió de ella cuando Grifth usó su boca. Su coño seguía mojado y caliente.Te mereces una ducha. Claro que se lo merecía. Era una Oficial de Policía después de todo, no existía nadie más que merezca una ducha más que Rebecca.Quieres ponerte bella. ¿Lo quiero?Estaba demasiado cansada para ponerse guapa. Sin embargo, imágenes de ella vestida con el sensual vestido negro que usaba en sus citas, sin mangas, escote en forma de corazón y resguardaba humildemente sus muslos, o con el mini short deportivo rojo y el top azul ajustado que usaba cuando iba a correr al parque, con la segunda intención de seducir a un muchacho, dispuesto a complacerla en todo gracias a su figura, afloraron en su cabeza. Si lo quieres. Si, lo quiero. Ya lo decidió. Se pondría el mini short y el top, mucho más cómodos para andar por el ...
... hogar. Ella sonrió ante su resolución y abrió la puerta para bajar del auto. Él bolso. Volteó su cabeza a donde sabía que estaría el bolso deportivo negro que siempre llevaba al trabajo: en el asiento del acompañante. Ella no recordaba haberlo recogido de los vestidores.Si lo recuerdas. Claro que lo hacía. Pero no estaba al corriente de ello porque salió enojada con la persona que interrumpió su momento de pasión con Grifth. -Mañana habrá problemas -dijo bajamente. En realidad, no le importaba. Ella tomó el bolso, bajó del auto y se encaminó a su apartamento. Lo había encontrado en oferta, cuando buscaba donde quedarse después de mudarse de la casa de sus padres en Somerville, el infierno en la tierra para Rebecca, mientras estudiaba en para ser policía. Era bastante amplio, tenía todo un piso para ella sola, quedaba cerca de la Academia, lo que le ahorraba tiempo de viaje, los vecinos eran indiferentes, la clase de gente que no metía sus narices donde no le llamaban, y el alquiler era barato. Si bien después supo porque el precio era tan barato. El vendedor se lo dijo un año y medio después, cuando venía a informarle que la agencia de bienes raíces donde trabajaba iba a aumentar la renta. Habían matado a cuatro personas ahí, toda una familia, ajustes de cuentas según los rumores que escuchó en la Estación después de que se enterara. Por supuesto, que a ella eso no le importó, sin embargo, si le importo que subieran su alquiler e hizo una reclamación al agente inmobiliario por ...