El culo de mi tia 2 - Relatos Eróticos

El culo de mi tia 2

... esta vez sin nada que se interpusiera, sentí un calor, un morbo y un placer extra planetario, incomodado un poco por el líquido pre seminal frio que se untaba entre el culo y la cabeza de la verga, pero no importaba, yo seguí restregando, con una mano separe la nalga derecha, que era la que estaba en el aire, queriendo ver el ano, y lo hice, a diferencia de las nalgas este si no lo pude ver con la poca luz que entraba, pero no evito que lo sintiera con la verga, esos ricos pliegues, en ese momento mi tía luego de un rato sin hacerlo mostro reacción, separándose un poco, supongo que pensó que se lo quería meter, y aun que así era, no pensaba intentarlo ya que claramente ella no estaba preparada para tener sexo anal esa noche, (luego supe que nunca lo había hecho), en todo ese tiempo no nos habíamos mirado, creo que a diferencia de los relatos donde hay muchos besos, declaraciones de amor y cosas así, nuestro comportamiento era más bien llevado por el morbo, nunca pensé en besarla ni nada parecido, mi atracción era más sexual que otra cosa. me vi en un punto en el que no supe que hacer, cuando tuve sexo con una novia, todo era más de besos, caricias y al final el sexo, pero acá nos habíamos saltado ese ''abcd'' de las relaciones, pensé en hacerle sexo oral, y talvez si no le incomodaba chuparle ese culo, que me moría por comer, desee con toda mi alma que mi otra tía no estuviera ahí, pero obviamente esto no la desaparecería, un pensamiento muy egoísta ya que ella estaba ...

... ausente de nuestra situación. Pero ya no era solo yo el que se arriesgaba sino también mi tía, creo que esa compañía en el peligro me motivo a sentarme en la cama, y por primera vez, ver la cara de mi tía, que como ya sabía tenía los ojos abiertos, me miro de reojo, y sonrió un poco, estaba expectante, yo le la sonrisa, nadie dijo nada, simplemente la volite de estar de espaldas a mi a estar boca abajo, y puse mis manos debajo de su estómago jalando, dándole a entender que quería que parara el culo, y lo hizo lentamente, parecía que la noche no haría más que empezar, las visiones y sensaciones eran cada una mejor que la anterior, el culo de mi tía en 4 (con la cabeza en la almohada) Hizo que sintiera un espasmo en la verga, casi me monto en el sin pensar en nada, pero ya me había saltado muchos pasos, no quería pasar de ''e a z'' así que le di una lamida, a una de las nalgas, seguida de una en la vagina, aun se sentía un poco de olor a jabón del baño antes de acostarse, pero entre el sueño y el sudor de la noche ya no se sentía el sabor, el próximo lametazo fue desde el clítoris hasta el ano, pensé en repetirlo varias veces, pero al llegar al ano, no pude detenerme y me quede chupándolo, lo lamia, succionaba, quería comérmelo, de nuevo no sé cuánto tiempo estuve haciéndolo pero, hasta que no estuve medianamente satisfecho no pare, por primera vez en la noche sentí que mi tía hacia algunos gemidos con la cara en la almohada, nada escandaloso por mi tía que dormía al lado, note que ...