En la casa de playa de mi ex compañera del colegio
Fecha: 24/06/2019,
Categorías:
Infidelidad
Autor: sandra garcia, Fuente: CuentoRelatos
... pero no podía evitar sentirme excitada, el trago, la abstinencia, y estar solos en ese cuarto en ropa de baño ya hacia efecto en mí, lo trate de separar sin mucha fuerza ni entusiasmo, no sabía qué hacer, no sabía que decir, y solo me salió: —Pepe, no, no, que luisa va a regresar en cualquier momento. El me abrazo más, inconscientemente le había dado el mensaje de lo que me preocupaba era que luisa nos sorprendiera, sin más me sujeto con sus dos brazotes peludos que al tocarme me hicieron estremecer, retrocedí y me choque con la pared, lo tenía pegado mí. —Sandrita no te preocupes, cuando luisa va al juzgado, siempre dice que regresa en 10 minutos, y la verdad nunca baja de una hora, puta madre que cuerpito Sus manos ya tocaban todo mi cuerpo y su boca ya buscaba la mío, yo "intentaba" evitarlo, movía mi cara de una lado a otro, en eso mi cuerpo dio un respingo, el maldito había pasado su mano por la parte baja de mi bikini y un dedo peludo se había metido en mi conchita. Y se movía circularmente, —que rica conchita, que rica y mojadita estas, con razón con el marido que tienes, estas muy desatendida, pero no te preocupes que ahora lo arreglamos. Me levanto como una muñeca, y me recostó en la alfombra, de un tirón se bajó la trusa dejando ver una verga que era el doble de mi marido, tuve miedo, me iba a desgarrar. —no no pepe, no sigas, no lo hagas, no no no noooo... Sin más se agacho encima mío y de un tirón me saco la parte de arriba del bikini, dejando libre mis grandes ...
... senos, sus ojos se le salían Que ricas tetas, hum hum, que ricas, hum Me chupaba una y otra, lo peor o mejor, fue cuando comenzó a succionar mis pezones, ahí si me descontrole, me cuerpo se retorcía de placer —uh uh uh, que rico, no no, que ri ricoooo... de de déjame de de... Fue bajando y entonces comenzó a comerme la conchita, sentía su lenguota y cara mal afeitada que me hacía retorcerme de placer, ya no era yo quería mas, le sujete la cabeza para que no dejara de comerme abajo, entonces sentí como el fuego que invadía, y me retorcía, si era un orgasmos tremendo, todo mi cuerpo temblaba, no había terminado con esa sensación cuando me di cuenta que el ya había separado mis piernas, y comencé a sentir como un cilindro de carne caliente entraba en mí, pero también como mi conchita estaba preparada con lo mojadita que estaba y se estaba comiendo todito ese monstruo cabezón de un solo ojo, sentí el golpe en mi pelvis cuando toda esa verga estuvo dentro de mí, entonces comenzó el mete y saca, como un pistón entraba y salía, una vez y otra vez, yo me sentía en ese momento una perra, con su macho. —papito, que rica verga, no papi no papi, no no no... la saques, no noooo... Mi cuerpo pedía más y más, mis piernas se habían trenzado a su espalda, para no dejarlo que se me escapara, esa maza seguía entrando y saliendo de mí, no podía mas y me vine por segunda vez, el seguía y seguía, era una bestia, con razón luisa se quejaba, que más daría yo por tenerlo todos los días en mi casa, yo ...