La vendedora de ropa para mujeres
Fecha: 06/05/2019,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... de mi presencia y la salude con la mano para despedirme, devolviéndome ella el saludo con una amplia sonrisa. Mi jugada siguiente fue llamarla al local, la primera vez que fui el marido me dio la tarjeta), me atiende vamos a llamarla Sandra y fui directamente al grano, "no llamo por la ropa llamo porque te quiero ver fuera del negocio, me gustas mucho y no me importa que estés casada", ella empezó a dar vueltas hasta que al final me dijo que tenía un rato libre por la tarde. Quedamos en encontrarnos en el Shopping, ella vestía con un pantalón blanco ajustado, remera negra a rayas blancas y unas sandalias blancas con taco de 10 cm. lo que hacía estilizar su figura dándole un aire de sensualidad indescriptibles, nos saludamos con un beso y una intensa mirada a los ojos, entonces la invite a tomar algo, fuimos al local de los famosos alfajores marplatenses. Allí me conto pormenores de su vida, que tiene dos hijos varones, que el de quince años la vuelve loca, y comenzó a indagar mi vida, le mentí por supuesto que no tenía pareja y venia de sufrir mucho por una ruptura de una relación de años, nos mirábamos permanentemente, hasta que ella se paró y me dijo que tenía que ir al baño, las instalaciones del baño quedan en el piso superior al lado de las salas de cine, entonces camine detrás de ella y la espere a la salida ansiosamente, cuando ella sale la tomo de la cintura la atraigo hacia mí y la aprieto contra la pared y comienzo a comerle la boca, Sandra me responde de forma ...
... espectacular, por espacio de 10 minutos nos besamos como desesperados, yo manoseando sus enormes tetas y su culo y ella tocándome el pedazo a través del pantalón, la fiesta termino cuando una mujer de seguridad se acercó al baño, dejamos de besarnos, la encargada de seguridad no dejaba de mirar mi enorme erección. La tome del brazo y fuimos caminando a un hotelucho que está cruzando la General Paz, entramos y solo tenían una habitación disponible sin aire acondicionado, la tomamos igual, apenas cerramos la puerta ella se arrodillo y comenzó a bajar el cierre de mi pantalón dejando al descubierto mi enorme pene todavía flácido, se lo metió en la boca y comenzó a chuparlo con avidez, sentía como mi miembro crecía en su boca, de golpe se detuvo y comenzó rápidamente a desnudarse, diciéndome "ponete en bolas que ya no aguanto más", me desvestí rápidamente ella estaba desnuda en la cama con las piernas abiertas, se le veía la concha rodeada de una gruesa mata de pelos negros y todavía conservaba el corpiño negro totalmente transparente, en donde se marcaban unos enormes pezones oscuros del tamaño de un plato de pocillo de café, totalmente al palo me abalancé sobre ella y comencé a penetrarla suavemente, por cada centímetro de verga que le metía adentro ella duplicaba los gemidos, hasta que no aguanto más y tuvo su primer orgasmo, en ese momento le enterré la pija hasta el fondo, grito de dolor pero al cabo de unos segundos, comenzó a mover sus caderas frenéticamente, me pedía más y ...