1. Trágica historia de sexo


    Fecha: 27/12/2018, Categorías: No Consentido Infidelidad Autor: Gabriel B, Fuente: CuentoRelatos

    ... verdad. La chica volvió con la cerveza y como se había quitado la camperita, ahora llevaba una remera musculosa con un lindo escote. β€” Le pedí que se viniera toda de negra. Le queda bien ¿no? β€” Que obediente la zorrita. β€” dijo Mauro, cosa que me confirmó que se trataba de una puta. Era cierto, la ropa negra hacía una buena combinación con esa piel blanca, de una palidez encantadora. La chica comenzó a servir la cerveza, y cada vez que pasaba al lado de uno de los hombres, aprovechaban para manosearle el culo. β€” Tranquilo, hombre. β€” le dijo Germán a Mauro, cuando este se había entusiasmado mucho metiendo mano entre las nalgas, enterrando los dedos en la raya del culo. β€” ya dijimos que no vamos a cogérnosla hasta que decidamos cómo vamos a hacerlo. La chica siguió sirviendo cerveza, como si no hubiese oído. Gonzalo también aprovechó cuando la tuvo a su lado. Acarició primero sus piernas, a través del cuero, y finalmente tanteó las nalgas. β€” No puedo creer lo buena que está. β€” dijo. La chica se quedó un rato parada para que Gonzalo se deleite. Sin embargo, al igual que con los otros dos, no mostró un ápice de entusiasmo. Parecía más bien resignada. Mi verga estaba totalmente erecta. Pero no la manoseé. Toda la situación me parecía muy turbia. Había algo que no me cerraba. β€” Juguemos al truco. β€” propuso Mauro. Jugamos Gonzalo y yo contra Mauro y Germán. β€” Hagamos una apuesta. β€” dijo Germán cuando la primera mano ya fue repartida. β€” los que ganen serán los primeros a los que ...
    ... esta puta les chupe la pija. Miré a la chica. Parecía disgustada por la humillación, pero no dijo nada. β€” Igual no las vamos a coger todos, pero está bien. β€” dijo Mauro. β€” Para mí está bien. β€” dijo Gonzalo. β€” si soy el primero mejor. Jugamos un partido a quince puntos. Íbamos perdiendo por mucho, pero en el último momento, cuando estábamos a dos puntos de la derrota, Gonzalo reviró un envido, el cual ganó, ya que tenía treinta y tres puntos. Luego, cuando Mauro lo retrucó, él se animó al vale cuatro. En realidad, sólo lo dijo para asustarlos, porque no le quedaban buenas cartas, y no sabía cuáles tenía yo. Pero yo contaba con un as de basto, que fue suficiente para ganar la mano. Así que de una sola vez sacamos diez puntos y ganamos el partido. β€” A lo tuyo zorrita. β€” Dijo Germán. β€” Yo prefiero cogérmela. β€” dijo Gonzalo. β€” Esa no fue la apuesta. Quedate tranquilo que después jugamos a otra cosa. Ahora solo pete. La chica estaba mirando el techo, parada muy sexy, con una pierna flexionada, sacando culo. Sin embargo, se la notaba aún sin ganas. Yo me devanaba la cabeza pensando en por qué estaba con nosotros si no quería hacer nada. β€” Acordate de lo que hablamos. β€” le dijo Germán. β€” Hoy tenés que hacer todo lo que te diga. La chica no dijo nada. Miró a los costados. Fue hasta la cocina y trajo un montón de repasadores. Gonzalo se corrió para atrás, alejándose de la mesa, para hacerle lugar. La chica puso los repasadores frente a él en dos pilas, y se arrodilló sobre ellos. Gonzalo ...