Sexo en la oficina (3)
Fecha: 21/10/2018,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... Hasta ese momento nos dimos cuenta de la hora que era, ya había pasado la hora de salida, me apresuré a ponerme el brassiere mientras él se subía el pantalón, me arregle el liguero y las medias, le pedí mis pantaletitas que saco de la bolsa de su pantalón donde la había traído todo el tiempo, él mismo me las puso y me ayudo a ponerme el vestido, nos despedimos con un gran beso en la boca y salí de su oficina. Tomé mi bolso y me apresure a salir del edificio, me sentía un tanto sucia moralmente, era la primera vez que me cogían y enculaban después de casada y me daba "cruda moral" pensando en mi esposo. Tomé el Metro, en el trayecto sentí como de mi culito me empezaba a gotear el esperma de mi jefe, pues como todos saben el semen puede ser muy espeso pero unos minutos después se licúa y se vuelve agua pegajosa, pues esa aguita pegajosa empezaba a salir de mi colita adolorida pero satisfecha, pronto mis calzoncitos estaban empapados y el esperma licuado empezaba a escurrir por mi entrepierna revuelto con mis propios jugos vaginales que no me limpié por salir lo mas pronto posible del edificio, el trayecto a mi casa se hizo eterno, ya sentía como los líquidos del placer mojaban el encaje en que remataban las medias que portaba y amenazaban con mojar la media y las gentes me podrían ver como escurría de esperma, por fin llegué a la estación donde bajaría, el flujo que salía de mi ano ya llegaba a mis rodillas, ya estaba a la vista de todos, mi miedo era que mi esposo ya ...
... estuviera en casa y no tendría que decirle, tal vez lo único y difícil de creer era que me había ganado "la pis", aun tenia que caminar tres cuadras para llegar a casa y el semen seguía bajando por entre mis piernas. Por fin llegue a casa y al subir la escalera el esperma ya llegaba a mis zapatillas, abrí temerosa la puerta y comprobé que mi esposo aun no llegaba, lo que me devolvió el alma al cuerpo, bote mi bolso y velozmente me quite el vestido y el brassiere al igual que las zapatillas y el liguero y me metí a bañar con las pantaletas y las medias puestas para lavarlas, previamente expulse la totalidad del abundantisimo esperma de mi jefe y ahora amante. Apenas había salido de la ducha cuando llegó mi esposo y me encontró solo envuelta en la toalla, misma que deje caer en cuanto le vi quedando desnudita ante él y pidiéndole que me cogiera en ese momento, era como descargar mi consciencia de lo que había hecho, mi marido como de costumbre me complació dándome una suculenta cogida por todos lados, y aun cuando me dolía el culo, le pedía que me enculara mas y mas como si fuera una penitencia por el "pecado" cometido. Durante el resto del día estuve repitiéndome a mí misma que esa sería la última vez que le pondría el "cuerno" a mi marido, sin embargo llegando la noche nuevamente vino a mi mente la preciosa vergota de mi jefe y los hermosos güevotes que tiene lo que me excitó sobremanera e inconscientemente empecé a pensar durante la noche como me vestiría al día siguiente para ...