Sexo en la oficina (3)
Fecha: 21/10/2018,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... frente y en otros por detrás, al tiempo que cuando la póse lo permitía me metía su vergón en la boca para que se la mamara tomando con mi lengua las grandes gotas del cristalino y espeso lubricante natural que le brotaba de la punta de su glande o bien le lamiera sus encantadores güevotes. Aun recostada se colocó frente a mí separándome por completo las piernas, se bajo el pantalón hasta las rodillas, con su impresionante macana de placer golpeaba levemente mi vulva y la frotaba contra mi abundante vello pubico como anunciándome que me iba a penetrar, levante lentamente las piernas invitándolo a que me cogiera, enseguida colocó su "monstruosa delicia" entre los labios de mi vagina y poco a poquito fue empujando su colosal tranca, sería la mas grande que me hubiera penetrado, aunque la gran cantidad de mis flujos íntimos ayudaban como lubricante sentía que aquel descomunal vergón me partiría en dos, fui sintiendo como me iba entrando la formidable cabeza de su tremendo tolete, por fin entró en los labios interiores de mi raja sexual, yo movía mi cadera para aminorar el agradable dolor que me producía y facilitar la entrada del tronco que a cada centímetro me dolía un poco mas ya que a medida que iba entrando se hacia mas gruesa su gigantesca vergota. Entre apagados sollozos y gemidos de placer y un poco de sabroso dolor sentí por fin que la cabezota de su sensacional pitote tocaba la pared interna de mi matriz, la tenia hasta el fondo de mi cabidad intima y aun le ...
... quedaban fuera algunos centímetros de su "dulce monstruosidad", el bombeo empezó a tomar velocidad y a cada embestida la cabeza de su hermosura chocaba con el fondo de mi matriz y sus preciosos güevos se columpiaban golpeando mis nalgas, en unos cuantos minutos mi primer orgasmo llegó facilitando aun más la cogida ya que mis flujos vaginales lubricaban mejor mi raja ayudando a su rico vergón a entrar y salir de mi sexo, ahora lo sacaba en su totalidad para encajármelo nuevamente de un solo golpe dándome una sabrosa "verguisa", los ayes de placer de ambos se combinaban de manera apagada para evitar que nos fueran a oír del exterior del despacho y con voz muy baja le repetía que me cogiera mas, que me diera mas de su divina vergota, muy pronto para mi costumbre me llegó el segundo orgasmo, su suculenta macana estaba totalmente bañada con el néctar de mi sexo. Ante el temor de que fuera a llenar de leche mi vagina, en una de las veces que me sacaba su deliciosa tranca subí un poco mas las piernas y con ambas manos me abrí las nalgas a la altura de mi "chiquito" haciéndole una muda invitación a que me penetrara por mi culito, él dudo un poco de esa velada invitación tal vez pensando que seria imposible que su monstruosa lindura cupiera en mi apretado culo, con voz muy baja murmure "Enculeme licenciado", no sé si escucho pero llevó la terrible cabeza de su enormidad hacia mi colita chocándola con mi ano, introdujo dos de sus dedos en mi vagina mojándolos de mi fluido para después ...