La casa en la playa 4, 5 y 6
Fecha: 03/10/2017,
Categorías:
Gays
Autor: juanitocaminador, Fuente: SexoSinTabues
... una explosión de placer, creciente, siempre creciente. Hasta dónde llegarían? Para Jony, el espectáculo era también increíble: dos culitos bellos y perfectos, lampiños, de curvas suaves, uno al lado del otro, abiertos, mojados e implorantes de pija, que gozaban con su penetración y se movían inquietos y suplicantes cuando su pija los dejaba, dos agujeros dilatados al tamaño de su pija, llenos de su pre-seminal, cuatro bellas colinas, dos fogosos valles buscando a su labriego, era difícil aguantar tanto sin sacar ríos de leche, pero hacía lo indecible para demorar el momento, porque no se decidía en quién dejar su carga. El cansancio al fin llegó antes que el orgasmo y paró el mete saca cuando estaba labrando a Matías y se quedó recuperando aire mientras sus manos apretaban la cadera de Mati y su pija seguía bien puesta dentro del goloso culito de su primito. -Te agotaste primo? -Un poco, si -Mmm, dos culitos es mucho para vos Jonathan?, -le preguntó sonriendo Ezequiel -Dos putas ardientes como ustedes destruyen a un burro, -retrucó, un poco ofendido Jonathan. -Vení que te saco la leche, -invitó Eze -Andá, yo sé por qué te lo digo, - le recomendó Matías. Jony en un segundo ya se la había metido a Eze y allí comenzó la bueno para él. Eze era un maestro meneando el culito y controlando su esfínter. Comenzó haciéndole un mete y saca a pura cadera y nalga, cortito y rápido, luego comenzó a mover sus nalgas circularmente, se agachó, se levantó, acarició con su esfínter cada ...
... rinconcito mínimo de la pija de Jony, que no paraba de quejarse de placer. Luego le pidió, le ordenó en realidad que lo tomara de la cadera y lo empujara hacía él, para repetir su trabajo de nalgas pegado al pubis de Jony y por ende a la sensible raíz de su pija. Jony no pudo resistir, su leche ya venía, Eze lo sentía en esa pija que se engrosaba dentro suyo, y para aumentar más la sensación de su macho comenzó a apretar y aflojar su esfínter, ya eso fue demasiado y con un ahhh interminable Jonathan descargó sus huevos repletos de leche tibia y espesa en ese culito ardiente que quemaba y necesitaba que su leche lo apagara. Apenas acabado, Ezequiel se liberó y se acostó boca abajo en la cama, con ese sonrisa tan especial que tenía cuando sentía el semen de un hombre fluir dentro de él, con los ojos suavemente cerrados y esa expresión beatífica que Mati aún no comprendía bien, tal vez porque su cuerpito aún estaba aprendiendo a sentir. Se acostó a su lado, le tomó la mano y se quedó mirándolo. Jony se fue a sentar de espaldas en la cabecera de la cama y, a pesar del espectáculo de esos dos cuerpos bellísimos, de esos culitos lado a lado, de esas espaldas terminadas en dos hoyitos justo antes de que las suaves montañitas de las nalgas comenzaran a tomar vuelo, se dedicó a mirar su pija y a acariciarla, orgulloso de su faena. 6.- El debut de Jony Luego de un rato de silencio comenzaron las charlas y las bromas, sobre lo putita que era Eze, sobre lo durito de las nalgas de Mati, sobre la ...