Una Nueva Puta en el Catálogo... es Profesora - Relatos Eróticos

Una Nueva Puta en el Catálogo... es Profesora

... araña de cables negros, entrelazados, doblados y algunos en mal estado, provocando una fuerte chispa que hizo que la muchacha de enormes tetas diera un saltito hacia atrás. La muchacha estuvo segura de haber visto una enorme chispa en ese lugar y algo de humo emanó de ahí, por lo que rápidamente fue hasta el refrigerador y tomó varias latas de bebida que ayudó a trasladar en sus enormes tetas. Abrió la primera lata y la lanzó contra esa araña de cables y, ahora sí, una chispa se encendió. Ahora lo hizo con dos latas de bebida y la chispa se convirtió en llama y el humo la hizo sentir un poco de miedo, pero tomó las últimas dos latas y las lanzó, provocando que ahora la llama se convirtiera en una pequeña llamarada... era menor que una fogata, pero por ahora le servía. Luego, tomó la torre negra más cercana y la dejó caer contra la llamarada, haciendo que lentamente comenzara a vérselas de cerca con ese pequeño fuego.

“Bien... quizás pueda tener tiempo de encontrar a Facundo, Alonso y que me ayuden a quemar el resto” se dijo Karla, sonriente y luego pestañeó rápidamente, recordando a alguien.

Mateo:¡KARLA!-La muchacha de enormes tetas tomó el teléfono.

Karla:Creo que tengo una idea, amor, nos vemos pronto... un beso-Estuvo a punto de colgar, pero le faltó agregar algo- ¡Te amo!

Si hubo una respuesta, no la escuchó, no tenía tiempo, menos al sentir los chispazos de la corriente a sus espaldas. Avanzó con rapidez hacia la puerta y la abrió de golpe, ...

... encontrándose con unos gemidos escalofriantes provenientes de un salón que estaba casi justo al frente de la sala de dónde venía saliendo. Por un momento recordó donde estaba y un escalofrío recorrió su cuerpo, porque lo último que necesitaba era caer en las garras de algún tipo de esa Hacienda, pero rápidamente se dijo que le daría una patada en los huevos y huiría. Pero esos gemidos no le parecían ajenos, nunca los había escuchado, pero había algo que se le hacía extrañamente familiar.

“No puede ser” se dijo Karla, quien luchaba con la idea de largarse de ahí y buscar a sus amigos, pero su curiosidad era mucho más fuerte.

El salón no tenía puerta, tenía una cortina que ella corrió y justo en ese momento FACUNDO soltaba sendo suspiro cuando penetro ese enorme culo... ¡el culo de su amiga! FERNANDA soltó un gemido que le pareció involuntario, con sorpresa, pero notó en su rostro el profundo agradecimiento que estaba sintiendo por tener ese gordo pene en su interior, lo que acompañó de un sonoro suspiro.

Fernanda:Mi culo es tuyo...-La muchacha de enormes tetas no lo podía creer, no podía creer ver a su amiga siendo penetrada en el culo por Facundo ¡por Facundo!

“Ese pene es gordísimo” se dijo Karla, algo horrorizada.

Karla: ¡Facundo! ¡Karla!-Ambos miraron hacia la entrada y se encontraron con la mirada de la muchacha de enormes tetas, quien había olvidado el momento en que se cruzó de brazos. Como una madre que se encuentra a sus niños haciendo una fechoría.

Facundo: ...