Alicia y Cristina
Fecha: 03/03/2018,
Categorías:
Hetero
Autor: adalberto1979, Fuente: SexoSinTabues
... plenitud sus pechos planos como los de un niño pequeño, pero esos pezones hacían toda la diferencia. Pequeños, puntiagudos y bastante erectos. Ella misma se apretó ambos pezones con sus manitas, gimió suavemente ‐ A tío Ben le encanta cuando hago esto-- se detuvo y añadió-- y le encanta mas cuando lo hace él mismo. ¿Quieres hacerlo también? ‐ Alicia-- Di un grito ahogado--no puedo, eres solo una niña de 8 años ‐ Bueno, tu sabes-- ella sonrió—pero, no tengas miedo, Es fácil, déjame mostrarte-- Ella extendió la mano y guio mi mano en su pecho plano. ‐ Aprieta mi pezón—susurró-- continúa. Realmente quiero que lo hagas. Yo quería que lo hagas. Quería que lo hubieras hecho el sábado Mis dedos fueron guiados a su pezón y que se juntaban las pequeñas protuberancias duras, mis manos temblaron al contacto, ella rio ‐ Vamos tonto, no voy a morder Estaba totalmente hipnotizado por esta niña de ocho años de edad. Estaba mal, tan mal, pero ella una vez más guio mis dedos temblorosos a su pequeño pezón los dejó. Esta vez seguí alrededor de su pequeña prominencia y ella gemía con tanta dulzura. Era tan pequeño y tan duro y tan erótico. Mi pene latía sin control. Todo lo que sabía era que quería experimentar más de los encantos de esta pequeña niña Separé las palmas de las manos alrededor de su delgado tórax y la atraje más cerca de mí. Ella suspiró con anticipación, sabiendo muy bien lo que estaba a punto de hacer. Ella misma acerco mi cara a sus pechos, mi boca se posó en uno de sus ...
... pezones. Eran dos pequeños pezones los más dulces que había tenido en mi boca. Eran de tamaño milimétrico, pero mientras lamía primero uno y luego el otro la hacía temblar de emoción ‐ Oh, sí-- gimió suavemente-- Me encanta, más, más Obediente, chupé suavemente cada uno de ellos, haciéndolos girar vueltas y vueltas con la lengua. Lo que era tan erótico y emocionante fue la sensación de su pecho plano donde un día sus pequeñas tetas comenzarían a madurar y florecer. Tan plano como el pecho. Ella envolvió sus bracitos alrededor de mi cabeza atrapando mi boca alrededor de su linda pequeña protuberancia. Libera la presión sólo para empujar la cabeza hacia un lado para que pudiera comenzar en el otro pezón un poco menos erecto. La sensación del pecho plano de la niña, que acababa de salir de su mundo, era el cielo. Tenía la esperanza de que nunca acabara, pude sentir sus jadeos y su pequeño cuerpo comenzó a retorcerse. Yo estreché su delgado cuerpo perfecto de ocho años de edad, para estabilizarla. Una de mis manos se había deslizado abajo de la cintura delgada y sobre sus caderas inexistentes y apretó sus pequeñas nalgas. Le había subido su vestido y me encontré a tientas sus nalguitas cubiertas por su pequeña pantaleta. Estaban tan pequeñas, pero muy firmes. Se las apreté notando el placer que le desencadenaba jadeando aún más de emoción. Alicia tenía el cuerpo de una diosa en niña. Su piel era tan tierna y suave como la de un bebé pequeño. Su cabello era largo y le caía en cascada ...