Mis queridas y promiscuas nietas - Parte 1 - Agatha - Relatos Eróticos

Mis queridas y promiscuas nietas - Parte 1 - Agatha

... carga su buenos 22x6cms, con un buen sombrero colorado. Así es que mi querida nieta había descubierto mi tripa erecta. No dijo nada pero estaba claro que le intrigaba. Llevé a Fernanda a su cama, la acosté y le di las buenas noches a mi otra nieta. Llegué y me acosté, poniendo la TV bajita con el fin de ver alguna película erótica o algo de porno en el cable, lo tenía con control parental para que no pudieran las chicas descubrirlo sin querer. Es que estaba algo excitado y tenía intención de masturbarme esa noche. Al ratito siento que se abre la puerta y Agatha vestida con una remerita y en bombachita se para en el dintel y me pregunta si puede dormir conmigo. Me resultó extraño y además yo estaba totalmente empalmado y muy excitado por lo que estaba viendo en la tele, y sin esperar mi confirmación, saltó a la cama y se metió bajo las sábanas, menuda sorpresa cuando al arrimarse a mí descubre dos cosas, primero que yo no tenía el pantalón del piyamas puesto, y segundo tenía la pija como una tabla, dura y cabezona. No me dio tiempo a nada y corriendo de un tirón las sábanas me deja destapado con mi cipote envenado apuntando al cielo. Guauuuu abuelo, por qué está tan grande  tu pito, y qué grueso. Yo no sabía que hacer. Y me decidí por lo más simple, restarle un poco de importancia y decirle la verdad. Es que extraño a tu abuela, y estaba mirando una película de señoritas y eso me excitó mucho. Ella se quedó pensando y observando mi pene, no le sacaba la vista de encima. ...

... Finalmente parece haber tomado una decisión, y arrimándose más a mi, extiende la mano y toma mi verga desde el tronco, primero suavemente, luego la zamarrea como para ver cuan dura está. Yo la observaba, y me dí cuenta que ya no era tan chiquita, y que sus tetitas habían crecido bastante, de hecho ya se notaban bien, sus pezones estaban erectos apuntándome bajo su remerita. Sus nalgas se habían rellenado, tenía un hermoso par de piernas para su edad, su culito era precioso. Y eso me enterneció y me calentó. Ella seguía tocando mi rabo y había descubierto por si sola que moviendo arriba y abajo la mano el cuero descubría y cubría la cabezota. Y perdiendo un poco la cordura a manos de la libido, le pido que le de un besito a la cabeza. Ella lo pensó y sin dudarlo mucho aproximó su boquita al glande y le planta un beso de labios mojados, papito, qué sensación más erótica, le tomo suavemente la cabeza y se la aproximo a mi pija, ella entendiendo que se espera de ella se mete la cabezota y parte de la verga en la boca y comienza a chupar y rozar con los dientes, le explico que solo con los labios, sin dientes. Lo corrige y a los cinco minutos me está dando una mamada de novela, mi pija está a reventar, mas larga y gruesa que hace mucho tiempo. Su boca es muy caliente y me brinda mucho placer. Le saco la verga de la boca y le bajo la bombacha y la remerita dejándola desnudita, y la posiciono subida a mi estómago, la cabeza hacia mis pies,  con la boca nuevamente en mi pija y su culo ...