Un compañero especial 5 - Relatos Eróticos

Un compañero especial 5

... babas brotaban de mis comisuras, dirigí mi vista a su rostro y con los ojos cerrados denotaba que estaba en un trance profundo. Carlos disfrutaba mucho de cómo yo le chupaba la pija. Para un poquito me dijo, si seguís así me vas a hacer acabar, tendete sobre la cama me ordenó, y me acosté de la misma forma en la que él me había visto en la habitación de Bryan apoyado con los podos y con la cola para arriba, se zambulló detrás de mí y con mis piernas abiertas él se colocó hecho un ovillo y comenzó a chuparme el culo. qué desesperación tenía Carlos porque metía su lengua lo más que podía dentro de mí augerito y con sus manos una en cada cachete los apretujaba y los separaba la vez, arrancandome unos gemidos terribles de placer. Me escuchaba gemir y parecía una gata en celo, esto pareció enloquecer aún más a Carlos que se posicionó encima mío, apoyo su palma izquierda al costado de mi cuerpo con su mano derecha  redireccióno la cabeza de su pija y con un par de movimientos ya la había introducido en el agujerito, así nomás, sin más preámbulos, la metió de una, y otra vez me hizo arrancar un alarido, acrecentó más su locura y hundió hasta el fondo de mis entrañas ese palo precioso, ya con toda ...

... la pija adentro apoyó sus dos palmas al costado de mi cuerpo y comenzó un frenético ida y vuelta, qué hermoso te tengo como ayer a la tarde y en menos de un día te cogí tres veces me dijo con voz ronca, aseverando lo que yo pensaba con una sonrisa pícara y envuelto en mucho placer lo miré girando mi cabeza por arriba de mi hombro izquierdo y le dije te aprovechaste de mi dormido y me cogiste el culo ayer a la tarde. yo estaba tan caliente que comencé a hacer movimientos pélvicos para arriba y para abajo ayudándolo a él hacer estos movimientos, ayudando a que se metiera hasta el fondo su poronga introduciéndola hasta los huevos, de la forma que le hablaba parecía que más lo calentaba al macho que tenía encima mío, pasó sus brazos por debajo de mis axilas aprisionandome los hombros apretando su pecho contra mi espalda para que directamente no me escapara de su dominio, igualmente lo último que quería en el mundo era salir de la situación donde estaba, Carlos no aguanto más y me dijo voy a acabar, sacando su brazo derecho para permitir que mi mano llegará hasta mi pija y poder masturbarme, ninguno de los dos tardó nada,  los dos explotamos, yo en la cama piel dentro de mí culo. Continuará.