1. A mi primo le gusta ser mi perra


    Fecha: 25/01/2020, Categorías: Incesto Tus Relatos Autor: Anónimo, Fuente: computo.ru

    ... salivaba mucho. Luego de un rato me levante e hice que siguiera mamando mi verga mientras yo le acariciaba su ano, que es rosado, lampiño y muy lindo. Pasaba las yemas de mis dedos por su ano, empecé a meter un dedo, lo hacía poco a poco para que no le doliera y sintiera como entraba. Cuando ya todo mi dedo estuvo dentro de su estrecho y rico culo, saco mi verga de su boca para soltar un gemido y decir: que rico primo, me gusta mucho ser tu perra, me haces sentir toda una mujer. Yo le respondí: que rico que te gusté, pero espera un poco más y vas a saber de verdad que es ser una perra y que vas a sentir más mujer que nunca.
    Le ordene a mi perra que se pusiera de nuevo en 4 patas y que levantara muy bien su culo, pues ya era hora de empezarlo a dilatar para que luego mi verga pudiera entrar con facilidad. Como aun tenia puesto su hilo, lo corrí a un lado y metí mi cara entre sus nalgas, le di un beso en su culo, le pasaba mi lengua en todas las direcciones y de vez en cuando empujaba un poco mi lengua dentro de su culo, también chupaba y escupía. Supe que mi perra estaba encantada por que no dejaba de gemir. Sin yo pedirlo mi primo puso sus manos sobre sus nalgas y las abrió, ya tenía ese rico culo a mi disposición lo lamí con más salvajemente, la escupí y metí dos dedos de una vez, esta vez lo hice un solo empujón. Con esto me asegure que su culo estaba bien dilatado, le pedí que volviera a humedecer mi verga pues ya era hora de que sintiera mi verga dentro de su culo. Me ...
    ... acosté de nuevo y mi perra me chupo de nuevo mi verga, ya cuando él se dio cuenta que estaba bien ensalivada se la saco de la boca y se puso saliva en su culo, me dio la espalda y fue metiendo poco a poco mi verga en su ano. Un rico ano que estaba muy caliente, estrecho y húmedo. Yo sentía como cada cm entraba poco a poco. Ya cuando iba por la mitad paro un poco y me dijo: primo que rica verga tienes, ahora si me siento toda una perra. Cuando él termino de decir esto yo empuje mi pene para que termina de entrar todo, él soltó un grito y un gemido cuando sintió lo que yo había hecho. 
    Le dije yo: ahora si mi putita mueve a tu ritmo para que ese rico y ganoso culo que tienes se acostumbre a mi verga. La putita de mi primo se movía como toda una bailarina exótica, lo hacía lento pero, de un momento a otro lo hacía rápido y gemía, gemía de placer. Yo le pedí que se volteara y que me cabalgara de frente que quería ver su cara de perra. Me hizo caso, saco mi verga de su culo, se dio la vuelta y volvió y se la metió toda de un solo sentón. Estaba vez mi verga entro más profundo pues sentí como se abrió su culo cuando ya estaba ensartado. Había llegado mi turno para moverme, así que comencé con movimientos lentos pero fuertes y fui subiendo poco a poco la velocidad, cada que lo hacía más rápido se escuchaban más fuertes los gemidos de la perra de mi primo. Metía y sacaba por completo mi verga y cada vez que hacia eso la perra me decía: ¡¡¡dame más pene primo, hazme tu mujer, me gusta ...