Demetria, la de Inpendencia
Fecha: 13/01/2020,
Categorías:
Primera Vez
Tus Relatos
Autor: Priscilla, Fuente: computo.ru
Demetria, la de Independencia
Me llamo Ernesto Nishikawa de La Riva, soy Pandino de nacimiento y vengo de una familia con muchas raíces en la historia de ese departamento del norte de Bolivia, incluso mi padre fué prefecto el año 1964, cuando pasó esta historia, allá por 1978, yo contaba con 31 años y vivia en Cochabamba, en una casita en la Avenida Oquendo, entre las calles Federico Blanco y Venezuela, tenia una tienda de artículos deportivos en una galería en la Avenida San Martin, mi auto, si bien era antiguo, funcionaba muy bien y siempre me servía para traerme una que otra amiguita para pasar la noche, también tenía una moto Italiana Guzzi de gran cilindrada, en general vivía muy bien, dinero no me faltaba y mujeres tampoco. Pero como todo hombre que vive solo, mi casa andaba muy desordenada, el jardín descuidado, ropa sucia por todo lado, botellas vacías, etc. En una ocasión mi madre Elena llegó de Cobija, me llamó la atención por ser muy descuidado, que mi auto andaba sucio al igual que mi moto, mi casa con polvo, mis muebles sucios , etc.
A A los pocos días se apareció con una cholita bastante alta, larguirucha, blanca y muy bonita llamada Demetria, tenía 16 años, era de Independencia, pueblo de la provincia Ayopaya, zona muy fría y lejana, mi madre le indicó sus labores domésticas, donde sería su cuarto y su bañito, cuanto sería su sueldo, etc, después de unas semanas, y cuando la cholita supo sus obligaciones, mi madre se marchó a Cobija. Yo era un ...
... soltero con bastante dinero, me cogía a cuanta hembra se ponía en mi camino, casi siempre los domingos amanecía con alguna mujercita, Demetria se puso al tanto de mis aventuras, incluso alguna vez me insinuó algo sobre mi vida aventurera, pero yo andaba muy ocupado cogiendo a cuanta perrita se cruzara en mi camino. Un fin de semana, mi empleadita me pidió permiso para salir con su amiga, una cholita que trabajaba en la esquina de la Oquendo y Federico Blanco, cuando volvió, a eso de las 8 de la noche, Demetria estaba muy alegre, señal de que había tomado chicha, costumbre Cochabambina, me contó que en una chicheria conocieron a unos hombres que las invitaron a una casa a tomar y bailar con ellos, pero ella se negó pues sabía que yo le llamaría la atención, no es que me importara lo que la cholita hiciera con su vida, pero a mi me inculcaron el respeto por la casa donde una persona vivía, y eso incluía el llegar temprano. Pasaron unos 4 meses, Demetria estaba mucho mas rellenita, se compró ropa nueva y sus polleras dejaban ver mas arriba de sus rodillas, se volvió muy coqueta, de pronto mis amigos empezaron a visitarme mas seguido, me di cuenta que era por ver a Demetria, yo me quedaba mirándola, tenía un cuerpo de adolescente campesina, con su trasero bien levantado y sus pechos casi reventando su blusa de cholita. ...