1. El Pequeño Vecino de La Esquina


    Fecha: 04/11/2019, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: Fantasía Sexual, Fuente: computo.ru

    Mi vecino de la esquina era un pequeño hermoso de 3 años de edad, cabello castaño claro, estatura promedio de un niño de su edad aproximado a los 90 cm, delgado, de nalgas pequeñas, cintura pequeña, color de piel trigueña y ojos color verdoso; su voz delgada y chiquiona, en fin, todo un ejemplar digno de admirar pero por lo mismo por mi muy codiciado y con ganas de obtener sus virtudes.
    Su madre, mujer muy joven, casi una niña inexperta que complicó su vida gracias a 20 minutos de pasión sexual sin garantía de un futuro a manos de un afortunado calenturiento que sumo a sus victorias la virginidad de aquella abandonada y desatendida pequeña proveniente de una familia muy disfuncional. En fin la cadena continuaba y  lo mejor de todo era que concluía con el descuido del pequeño, en pocas palabras las víctimas perfectas a mi perversión e intereses personales.
    Tal como pensé la chica fue fácil de seducir, de ganar su confianza y de hacer que aceptara hacer cosas a cambio de protección, amor y compañía. Fue así que tuve acceso a aquel dulce bebé objetivo de perversión, en la que una noche de romance y lujuria con su madre a la que fue fácil emborrachar hasta la inconciencia, terminé con el niño en su misma cama.
    Después de asegurarme que ella no respondía debido a la tremenda borrachera que le hice tomar y de dejarla totalmente acomodada en su cama desnuda y con aparente signo de sexo descontrolado y pasional, me dirigí al cuarto de mi dulce Ángel, quien dormía en una ...
    ... habitación al final de un pasillo algo separado del cuarto de su borracha madre; entré e inmediatamente me dirigí a meterme a su cama; hay que recordar que yo ya estaba desnudo debido al supuesto sexo que tuve con su mamá.
    El niño dormía profundamente por lo que fue fácil acomodarme a su lado, acariciarlo un buen rato al tiempo de irlo desnudando. El plan era claro tratar de que cuando él despertara fuera porque sintiera que le iba entrando mi verga al culo.
    Y así fue que una vez desnudo lo acomodé boca abajo justo al centro de su cama, separé sus piernas abriéndolas por completo y para evitar que al momento de la introducción las pudiera cerrar, lenta y suavemente se las amarré con una delicada toalla una a cada pata de la cama, así sería mucho más fácil controlar los movimientos de sus brazos y manos con los que si deseaba jugar a la resistencia. Terminado esto me monté arriba de él acomodando la cabeza de mi verga tan solo con un poco de saliva entre sus nalgas pero bien puesta en la entrada de su ano. El cuerpo flojo del niño por lo dormido que estaba y la suficiente fuerza con impulso hacia abajo y el objetivo de mi perversión se estaba cumpliendo sin problemas ... Mi verga casi de un golpe estaba dentro del culito de aquel bebé de 3 años, mismo que al sentir la invasión de su culo y el dolor que le provocaba la introducción de casi 20 centímetros de verga gruesa lo hizo despertar con un grito, tratando de quitarse y de patalear, cosa que jamás logró al tenerlas amarradas y ...
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