Ghost, Sccoby y yo. - Relatos Eróticos

Ghost, Sccoby y yo.

... decidido así que simplemente tome a Ghost, le di vuelta y escupi una gran cantidad de saliva sobre mi miembro, escupi de nuevo está vez en el culo del perrito, todavía se encontraba rosado y un poco salido lo que logro incrementar mi cañemtura todavía más.

Coloqué mi glande justo en la rosada entrada de su ojete y sin cuidado entré, de un sólo golpe la mitad de mi pene estaba dentro de el, justo después un alarido de dolor y sus intentos por liberarse sin embargo mi satisfacción iba en aumento, me quede quieto mientras se acostumbraba y Scooby se dedicaba a lamer mi raja con mucho esmero. 

Me retiré momentáneamente del interior de Ghost para tratar de hacer presión porque su interior se había vuelto tan estrecho y apretado como al principio de su desfloración. Solo tenía la punta dentro, esperando una de sus contracciones anales para poder enrar sin causar tanto dolor cuando de la nada Scooby decidió colocarse sobre mi para montarme, provocando que todo mi miembro resbalara de un firme y doloroso golpe dentro de Ghost.

El pobre solto un alarido, mientras yo suspiraba y gemia de placer puro pues tenía mi verga dentro de un lugar tan apretado y caliente mientras que mi ano recibía las embestidas de Scooby. Sus estocadas hacían que mi pene se clavara dentro de Ghost sin la ...

... necesidad de moverme.

Minutos después el nudo de Scooby entró causando un orgasmo maravilloso y una serie de incontrolables espasmos de placer, en cuanto terminaron libere a Ghost y yo espere a que Scooby saliera de mi. El lamia el punto donde nuestros cuerpos se unían, a la vez que yo trataba de moverme para sentir su nudo más profundo en mi caliente interior. Pasada alrededor de media hora su pene salió de mi, junto con varios chorros de semen que resbalaron por mis piernas hasta el suelo, cubriendo parte de mis bolas y mi verga con ellos. Yo me dediqué a masturbarme mientras él se dedicaba dedicaba limpiar mi culo y todo su esperma de mi cuerpo. Esto culminó en otro orgasmo, menos abundante que los anteriores pero igual de satisfactorio.

Sólo le ayude a limpiar su pene, palpitante y rojizo. Estaba muy cansado por lo que sólo me dormí. Cuando me levanté note lo tarde que era, limpie el desastre que había provocado y me bañe, borrando cualquier evidencia de mi aventura. En cuanto estuve vestido mis padres llegaron a casa y yo aliviado de no haber sido descubierto aunque deseoso de volver a repetir esta experiencia. 

Bueno, eso es todo por hoy, espero que lo hayan disfrutado. Cualquier opinión o pregunta al respecto ya saben a donde escribirme.

Se despide su amigo, Yanael.