Copiado de Internet
Fecha: 19/11/2017,
Categorías:
Fetichismo
Gays
Tabú
Autor: karencuriosa, Fuente: xHamster
... ella le animaron un monton ese par de besos, quizaporque no se los solía dar con nadie, y se puso los brazos en la cabeza y ahacer una cosa rarisima mirando hacia el suelo y emitiendo un ruido con la boca.Nos sentamos los tres en la mesa y nos dispusimos a comer unpar de pizzas que Julio ya tenía en el horno guardadas calientes, provinientesde pizza-hood o alguno de estos de las motos.Fuí charlando con Julio mientras de reojo me iba mirando aSusana. Tenía un muy joven y simpatico rostro y se veía que de las 24horas quetenía el dia, 12 se las pasaba sonriendo. Estaba rellenita y mejor, porque a miestos looks actuales de las tías tan delgadas no me gustan nada. Y esas formasredonditas y temblequeantes me ponían un monton. De echo en la misma mesa decomida se me empalmó el pijo pero no me causó ningun problema porque estaba todotapado por la misma mesa.Acabamos la comida y entablamos los tres una plática sentadosaún en la mesa. Me gané facilmente la confianza de Susana utilizando simplementemi mirada. En otras chicas normales tienes que usar la conversación y etceterapero son Susana unicamente me hizo falta transmitirle con mi mirada, que yo erabueno.Llegó el momento en que la conversación se hizo pesada pueshabía una mucho mejor cosa que hacer que charlar en la mesa. Se lo dije a Julio,que no era cuestión de perder el tiempo y que me estaba poniendo nervioso porqueSusana me gustaba mucho mucho.Julio dudo un segundo que a mi me pareció una eternidad yacabó diciendo: vamos a la ...
... habitación. Cogió a su hija de una mano y nosencaminamos los tres a su habitación de matrimonio (divorciado). Una vez ahí ledijo a Susana que se sentara en la cama, sentandose él en una butaca que tambienhabía en la habitación.Yo me senté junto a Susana e inicié mis maniobras deestimulación. Primero de todo le dije: tranquila, no te pongas nerviosa, vale?Ella tan solo me asentía con la cabeza pero viendo yo quesería dificil que mantuviese la calma, se lo traté de hacer entender bien. Ledije: voy a hacerte una cosa muy bonita que te gustara mucho pero si no teportas bien me parare y no te haré nada, vale?Esta vez ella asintió con la cabeza pero con gran fuerza,cosa que me hizo confiar en que trataría de controlarse. Puse mi mano en suhombro y empezé a acariciarla para estimularla. De momento se controlaba pues nohacía lo que hizo al principio cuando le dí los dos besos.Le besé el hombro mientras sin que se enterase le ibadesabrochando la blusa. Su padre seguia cada uno de mis movimientos pero a mi nome ponía ni un pelo nervioso. Pues le había relatado a este con exactitud, todolo que le pensaba hacer a Susana y no tenía que haber ninguna sorpresa.Al igual que mi boca acabó en su boca, la blusa tambienterminó cayendo en la cama, mostrandome un fenomenal cuerpo rechoncho que gruñiaya a cada una de mis besos y caricias.Si fuera una niña flaca, a esa edad no tendria en absolutoningun tipo de pecho. Pero como estaba gordita, se le habían formado ya unasapetitosas tetitas que chupé ...