Varados en el campo con Laika. - Relatos Eróticos

Varados en el campo con Laika.

... especie, me senté en el camastro y puse la lámpara en una cómoda alta, mientras veía a Laika gemir y gruñir al mismo tiempo, el morbo bizarro inundo mis sentidos. Empecé a desnudarme, mientras lo hacia el perro negro había empujado a las embestidas a la chola casi hasta chocar contra el camastro, en eso quedaron abotonados y el perro giro quedando ambos animales grupa con grupa, jadeaban cansados con la lengua afuera, la cabeza de mi perra literalmente quedo a la altura de mi regazo, no me pude contener y tuve una tremenda erección, empecé a jalármela mientras mi chola olfateaba mi entrepierna,, saco su enorme lengua y empezó a lamer mi verga y mis huevos llenándome de su saliva tibia y babosa, mientras lo hacía, se sacudía bruscamente hacia atrás y adelante por los intentos que hacia el perro negro para zafar su verga de su concha, ella mientras gemía quedamente seguía lamiéndome poniendo toda su atención a mi poronga. La muy puta estaba todavía ensartada y ya su voluntad de copular conmigo me la estaba demostrando, el olor a almizcle de perros era muy intenso.
En un momento finalmente el perro con un ruido sordo se desacoplo de la concha de la perra y al mismo tiempo empecé a acabar lanzando pesados chorro de semen directo a la boca y lengua de Laika, que no desperdiciaba resto alguno, para acomodarse mejor puso sus patas delanteras en mis piernas apretándome los huevos con una de ellas, cada tanto mordisqueaba mi verga con su boca casi desdentada, por el rabillo del ojo ...

... pude ver como de su concha caían colgajos  de semen de perro y sus flujos al piso.
Me incorporé algo tambaleante y abrí la puerta de la cocina que da al patio, el perro orondo después de su faena se escabullo en la oscuridad bajo la lluvia. Volví a la cama, claro ahora tenía toda la atención de mi perra, la habían cogido y se había tragado mi leche, la mire mientras me sentaba en la cama y le dije: “sos una putita de mierda se nota que gozaste con los dos machos que te toco hoy, y sabes una cosa?...mañana no regresamos,  vamos a aprovechar la lluvia esta y te voy a meter pija todo lo que pueda.” . me metí debajo de la frazada y la perra casi arrastrándose se metió en la cama, también por debajo de la manta, mientras se acomodaba sobre mi lastimándome con sus uñas las piernas y el pecho, hasta que quedo bien ubicada sobre mi torso, su concha mojada quedo sobre el lomo de mi verga, como en otras oportunidades espero hasta que pude meter mi verga en su concha, se la metí profundamente hasta los huevos,  ya que el semen del perro negro había lubricado bien su cajeta, la perra se sentó sobre mí, quedando bien ensartada mientras apoyaba sus patas delanteras en mi pecho, empezó con un vaivén de caderas restregando sus vulva contra mis huevos, jadeaba, su saliva chorreaba sobre mi cara y mi boca. Mientras lanzaba mi leche en el interior de su útero, podía sentir como su concha se contraía llenándose de jugos tibios, acaricie su pelaje largo y sedoso, todavía nos quedaban un par de ...