Desenfrenado y apasionante fin de año
Fecha: 04/08/2019,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: PATRI81, Fuente: CuentoRelatos
... marido me lamia mi clítoris. Me sentía como una reina, todos los hombres para mí y dure poco, me vino un orgasmo divino. Era toda una locura, me llenaban todos mis agujeros y se cambiaban, era un placer milagroso. Aunque mi marido después de comerse mi chocho, se había apartado dejándome con ellos 3 a solas. Ya era muy tarde y yo estaba bastante rendida, pero no quería dejar así a Juan. Me estaba follando por el chocho Rober, Carlos por mi culo y a Aníbal le estaba haciendo una mamada, llame a Juan, ni señas ni nada, se acercó, le hice arrodillarse para que estuviera a mí misma altura y le ofrecí el rabo de Aníbal, se mostró indeciso, hasta que Carlos lo animo y se decidió, entre él y yo nos comíamos el rabo de Aníbal, cruzándose nuestras lenguas, besándonos mientras chupábamos. No es algo que me importe, sé que no muchas de las personas que lo lean lo entenderán, pero el placer que me dio comerme un rabo junto a mi marido ha sido una experiencia única, maravillosa, excitante y salvaje. Lo comíamos los dos con las mismas ganas, con la misma excitación, tenía el rabo en mi boca y percibí que poco aguantaría ya Aníbal, le mire y me hizo una seña, me quite Juan se lo metió en la boca y entre Aníbal y yo con suavidad sujetamos la cabeza de Juan para evitar que se quitase, pero no hizo falta, recibió la corrida con mucho placer, se lo vi en la cara, después nos dimos un aparatoso beso y creo que el más largo desde el primero que nos dimos, recibiendo a la vez la corrida de Rober ...
... y Carlos, que me provocaron que yo también tuviese un enorme orgasmo. En nuestra habitación y lo cuento porque a Juan le da igual y me lo ha autorizado. Me confesó que había sido todo espectacular, pero que le hubiera gustado más que hubiera sido la de Carlos, que siempre le atrajo su rabo. Le prometí que se podía intentar la próxima vez. Aquí termino lo sucedido en este fin de año pasado. Me comprometí a contar lo que sucedió, escribir no es mi fuerte, pero soy una mujer que cumple con la palabra dada y mejor o peor ya está hecho. Para resolver muchas dudas y que no me llenen el correo, yo era una mujer de lo que se suele considerar “normal” una mujer casada felizmente, con un buen trabajo, muy comedida en mi vida diaria. Adentrarnos en esta nueva andadura mi marido y yo, no ha hecho que no estemos casados felizmente ni que no queramos menos, todo lo contrario, siendo ahora mayor aun nuestra complicidad. Todo esto lo digo porque sí, he cambiado en muchas cosas. Voy a cumplir 36 años, me gusta mi cuerpo y como mínimo soy resultona, no quiero perderme las nuevas cosas que he vivido y ahora me gusta hasta que me digan guarradas cuando voy por la calle, aunque no lo demuestro y antes me sentía ofendida. Me he vuelto muy viciosa, un buen rabo me hace perder el sentido y si es joven mejor. Todo esto no quiere decir que me guste cualquiera, soy muy SELECTIVA y espero que lo entendáis, que no busco a nadie, que no me pidáis fotos y que no me mandéis fotos de penes. P.D.: Este relato ...