Una noche de cumpleaños
Fecha: 03/08/2019,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... el brazo y babeaba, mientras que Heriberto aún despierto, tenía la mirada perdida en el televisor. Mi esposo no era la excepción, pude darme cuenta de que si le sumaba las cuatro copas que llevaba antes de salir, más las tres botellas de ¾ de ron que se habían consumido en la reunión, el muy cabrón llevaba al menos 14 copas encima. Si bien es cierto que siempre ha aguantado mucho, todavía no había comido nada y eso le restaba resistencia. Volví a voltear, Elena estaba sobándole la entrepierna alstripper, y este lucía feliz, pues tampoco perdía detalle de lo que mi esposo me estaba haciendo. Me sentí más excitada, sabiendo que el muchacho me veía las pompas y que le atraía mi redondo trasero. Súbitamente dejé de sentir la mano de mi marido, el desgraciado la había sacado para volverse a servir. Se sirvió un doble y continúo en el juego. Creo que iban cinco minutos del segundo tiempo, y aún faltaba el resumen final del partido. Sin embargo no me separé de él, pero ya no me abrazó ni acarició. Así que me dirigí a la sala, me senté a la derecha de Elena. Sofía se encontraba sentada frente a nosotras con el vestido levantado, ya sin calzones y su muchachito estaba acariciándole la pucha… Volteé hacía la barra y me percaté que los dos mocosos habían podido verme las pompas y la mano de mi marido entre ellas. Por qué no decirlo, sí, estaba excitada, muy excitada, y ver a mis dos primas loqueando y manoseando a estos muchachos me había excitado más… Uno de ellos, (el que estaba con ...
... Elena), se levantó y dirigiéndose a mí me dijo: Volteé a verlo y él simplemente me rozó una teta con sus manos… No sé que me pasó, pero deseé ser una prostituta y que me lo hiciera en ese momento. Mi raja se inundó y mi respiración se aceleró a mil por horas. Cuidando de que los de la barra no voltearan, puso su mano sobre de uno de mis senos y lo acarició, para mi sorpresa, lo dejé hacer, mientras cerraba los ojos. El muchacho continuó un momento y luego se dirigió al baño. Me encontré con las insistentes miradas de mis primas, miradas cómplices, miradas excitadas. Las cuatro volteamos hacía la barra y ahí seguían los cuatro alegres compadres, bien jarras, perdidos por un partido de fútbol mientras sus viejas le daban vuelo a la hilacha. Elena e Irene se dirigieron a la cocina para preparar algo de botana, y yo aproveché para sentarme frente a Sofy. Entreabrí las piernas y dejé que mientras elstripper la acariciaba a ella, pudiera tener un buen paisaje de mis muslos entreabiertos. El solo hecho de poderle enseñar mis calzones me tenía excitadísima, notaba como a medida que él me observaba, mi pantaleta se iba humedeciendo cada vez más. Mi prima de plano se descaró, y bajándole levemente el cierre, introdujo su mano por la bragueta recién abierta, me miró a los ojos, se relamió los labios, yo asentí aprobando su iniciativa, mientras yo continuaba enseñándole mis encantos, ella le pelaba la reata. Encendida y súper caliente, quise desahogarme en solitario, me levanté pero el ...