Mi vecino aprovecha mi error
Fecha: 19/06/2019,
Categorías:
Anal
Sexo con Maduras
Tabú
Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster
... mejor que me abras…” Dijo.Me quedé callada y quieta, pensando qué podía hacer para evitarlo.“Vamos, Ana, se me acaba la paciencia y entonces tu marido podría enterarse de que estás mostrándote en bolas a cualquier extraño…”“Sabrá el pobre Víctor que está casado con semejante putita?”. Insistió David. Con el riesgo de que pudiera escucharlo cualquier otro vecino…Muy despacio abrí la puerta y asomé apenas mi nariz.“Yo no engaño a mi marido; esto es simplemente un juego” Le dije.“Bueno, pero yo puedo hacer muchas cosas con lo que grabé mientras hablábamos en la red… Puedo pasar, así lo conversamos?” Me dijo irónico.Abrí la puerta para dejarlo pasar, sabiendo que ahora este turro manejaba ahora la situación. Pasó frente a mí; alargó su mano y me acarició la cola… No me dio tiempo para reaccionar.“Sos un verdadero hijo de puta”. Le espeté con toda mi bronca contenida.“Vos sos la que convierte a tu esposo en cornudo y el hijo de puta soy yo?”“Vas a contarle a Víctor de nuestro juego… o se lo cuento yo?” Dijo…Me miró fijamente y yo tuve que bajar la mirada, sintiéndome vencida.Mirando el suelo le pregunté qué quería, conociendo de antemano la respuesta.“Me calentaste siempre, Anita… no me canso de mirarte ese culo perfecto, incluso cuando vas de la mano de tu esposo…” Respondió sonriendo.“Ahora quiero que te saques ese camisón, porque no te cubre nada… y quiero que me muestres tus hermosas tetas así de cerca…”Me levanté el camisón por encima de la cabeza y quedé completamente ...
... desnuda frente a ese turro; otra vez solamente vestida con mis tacos altos.David suspiró, mientras la lujuria se le dibujaba en la cara.“Te juro que te mataría con mis propias manos”. Gruñí furiosa e impotente.Con aire despreocupado, David se acercó más a mi cuerpo.“Quiero que me chupes la verga”. Dijo sonriendo diabólicamente. Yo me sentía absolutamente expuesta y vencida; pero no podía pensar en nada mientras me arrodillaba frente a él, buscando su verga dentro de sus pantalones…Sin embargo, sentí una humedad entre mis piernas, como si esa horrible dominación de la que era objeto estuviera comenzando a excitarme. Su dura verga apareció cerca de mi boca y, con bastante reticencia, finalmente abrí mis labios. David entonces me tomó de la nuca y haciendo un rápido movimiento me la metió hasta el fondo de la garganta.Yo afirmé mi mano alrededor de su pija, mientras mis labios se ajustaban al contorno, que parecía ser bastante grueso.En pocos instantes me encontraba recorriendo todo el largo de la verga con mi lengua hacia abajo, chupándosela con bastante delicadeza.“Así me gusta, putita, que me demuestres quien es tu dueño ahora”.“Voy a llenarte esa boquita dulce con mi leche caliente”. Dijo gimiendo.Comencé a darle una mamada infernal, como para que nunca se olvidara de mí. Obviamente el resultado no se hizo esperar, ya que en pocos segundos, un potente chorro de semen tibio me colmó de sensaciones.“Quién es tu dueño, perra?” Preguntó todavía temblando de excitación.“Vos” Susurré ...