Nina Cap. XIII - Relatos Eróticos

Nina Cap. XIII

... las mayores, cuando la pude ver que tenía un chico por la boca y a dos en su concha, si dos en su conchita, la tenían tan abierta que aprecia que la iban a partir en dos, pero ella gozaba las pingas al final de la noche me comento que lo más que le gusto era que los chicos terminaran encima de ella que tiraran su semen en todo su cuerpo y en su boca, que le gustaba el sabor del semen.Esa noche ya que todos se habían retirado y todas estábamos dormidas la menor me despertó y me dijo que si podíamos salir a comprar unas coca-colas ya que se habían terminado y nos disponíamos a salir cuando le dije que si íbamos pero que ella tenía que salir desnuda y como era día de semana y más o menos las tres de la mad**gada era muy posible que no encontráramos a nadie en la calle, nos montamos a mi auto y salimos a un mini market, en el camino me encanto mucho ver a mi chiquita desnuda y que no le temía a nada cuando le propuse que tratara de meterse la palanca de velocidades en su coño y ver si le cabía dentro, más tarde yo en pedírselo que ella en tratar y como toda la atención adquirida en la noche, tenía su concha bien relajada y la palanca entro dentro fácilmente y estábamos por llegar al parqueo cuando al estacionar nos percatamos que habían un par de morenos (negros), fumándose un pito de monte cerca del área de basura que es donde trate estacionar en caso de que alguien llegara al estacionamiento y pudiera ver a mi hermana desnuda, entonces estacione el auto de lado y de retroceso ...

... para que no pudieran ver a mi hermana y yo todo esto solo lo pensaba sin decirle nada a ella, pero creo ya ellos la habían visto cuando entramos al estacionamiento porque ella venia sentada en la palanca cuando le pedí que se la sacara para poder hacer el cambio de velocidad a neutro, la cosa es que cuando yo salí del auto y estaba por entrar al mini ella saco la cabeza por la ventana y me pidió que le llevara un hot dog también, bueno, si no la habían visto antes, ahora si la vieron y para cuando yo regresaba de hacer las compras el auto tenía cuatro morenos de lo más grande en tamaño que existen puedo decir que tenían por lo menos casi dos metro de altura y muy bien musculosos alrededor de él viendo a mi hermana desnuda que no podía esconderse aunque quisiera, cuando llegue al auto le pregunté que querían y que si nunca habían visto a una niña desnuda para ganar una apuesta que había hecho, bueno tan bonita y tan deliciosa para comer, nunca, pero creo que hoy comeremos carne tierna, no lo creen mis amigos, y todos se rieron, yo sabía que estos hombres no nos dejarían ir tan fácilmente, que con lo que habían visto se habían excitado demasiado y yo tenía la culpa de lo que pasaría, cuando se me ocurrió y les dije que me gustaría mucho poder darles un blowjob una mamada de pinga siempre y cuando dejaran a mi hermanita en paz, más había yo tardado en hablar que uno de ellos en sacarse pinga frente a todos, yo he tenido mucha experiencia con hombres y he tenido muchas pingas de ...