1. Helena y su maravilloso esposo


    Fecha: 05/05/2019, Categorías: Sexo con Maduras Voyerismo Sexo en Grupo Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    ... sus rubios cabellos, ahogándole los gemidos contra las sábanas. Se quedó unos instantes quieto y luego comenzó a entrar y salir de ese dorado cuerpo, cada vez con más pasión y fuerza.El espectáculo me estaba enloqueciendo totalmente. Tenía ganas de salir de mi escondite y ocupar el lugar de Helena, para que esa hermosa pija me taladrara sin compasión, pero cuando apoyé mis manos sobre las puertas, recordé que se trataba de mi mejor amiga y para colmo… de su propio esposo. Ella ahora jadeaba de manera entrecortada, mientras el peso de Jorge la aplastaba contra la cama y parecía castigar su ahora dilatadísima concha con esa durísima verga. De repente se salió de ella con un gruñido, comenzando a pegarle palmadas en las nalgas. Luego la volteó boca arriba, apoyó esas hermosas piernas enfundadas en nylon sobre sus poderosos hombros y volvió a enterrarse dentro de ella en un solo golpe. Helena giró su cabeza hacia mí, gritando a todo pulmón mientras era penetrada. Jorge le dio bastante duro durante un buen rato, mientras mi amiga aullaba con fuerza ante la violencia de sus embates. Finalmente él tensó su cuerpo, se echó hacia atrás y gritó salvajemente, mientras le llenaba la concha de leche caliente.Ella por fin pudo relajarse un poco, miró hacia donde yo estaba, dándome a entender que había gozado muchísimo.Jorge liberó suavemente las piernas de Helena y se reclinó sobre ella, besándola en los labios amorosamente. En ese momento algo se deslizó dentro del armario haciendo un ...
    ... ruido apagado, pero audible lo suficiente como para que Jorge lo notara. Giró su cabeza hacia mi lugar, se salió muy despacio de Helena y caminó extrañado hacia el armario. Antes de que pudiera esconderme entre las ropas sentí las puertas abrirse y una fuerte mano aferró mi muñeca y me llevó hacia afuera.“Pero si es tu amiga del alma” dijo sonriendo y mirando de reojo a Helena, mientras se tomaba la enorme poronga con una mano y con la otra bajaba a meter un par de dedos en mi concha, que a esta altura estaba directamente en llamas.“Parece que le gusta tocarse mientras observa, no es así Anita?” Dijo, sacando sus dedos mojados con mis flujos y llevándoselos a la boca. “Mejor voy a darte una buena lección, para que aprendas a no espiar…” gritó, mientras tironeaba de mi mano para llevarme hacia la cama. Me tiró boca arriba y abrió bien mis piernas, acercándose mientras deslizaba su poderosa verga dentro de un condón. Helena mientras tanto parecía no reaccionar, estaba horrorizada de ver que su marido nos había descubierto el juego y para peor, se preparaba para cogerme delante de ella. Intentó detenerlo rogándole que no me hiciera nada, pero él la hizo callar y la empujó a un lado. Yo estaba también algo mareada, mirando fijamente como hipnotizada esa cosa enorme que estaba lista para partirme al medio. “Vas a conocer una buena verga” me dijo.Jorge puso mis tobillos sobre sus anchos hombros y comenzó a frotar su dura verga sobre mis humedecidos y dilatados labios mayores. Sonrió ...