Tratada como una verdadera perra
Fecha: 02/05/2019,
Categorías:
Anal
Primera Vez
Tabú
Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster
... enfebrecida concha con su semen.Me salí de él y gateé a cuatro patas buscando su verga todavía endurecida. Me la metí en la boca, tratando de lamer toda su leche.Entonces sentí el primer lengüetazo en mi concha y después otro y otro…Después sentí cómo me intentaban montar desde atrás. Intenté girar mi cabeza, pero Gerardo enredó su mano en mis cabellos y me obligó a seguir concentrada en su verga delante de mí.“Tranquila, Ana… yo siempre comparto las perras con Bronson…”Su perro estaba intentando montarme desde atrás. Chillé, diciéndole que nunca me había dejado coger por un perro, me parecía algo muy sucio…“Nunca lo hiciste? Te va a encantar… a todas las perras les gusta…”Intenté rebelarme, pero Gerardo me sostuvo por la cintura y el peso de su perro me aplastaba hacia abajo. Me sentía muy extraña, pero no podía decir que no me estuviera gustando, ser montada por un perro con una verga bastante dura y grande mientras yo se la comía a su dueño.Finalmente me dejé hacer. Moví un poco mi culo, intentando acomodarlo, colaborando con los movimientos de Bronson, que me buscaba con ganas.Mientras su perro me cogía, Gerardo volvió a acabar en mi boca y después me sostuvo sobre su cuerpo, para ayudar a que su fiel amigo terminara bien lo que estaba haciendo…Bronson me estaba clavando bien duro; se movía sin parar. Sus patas delanteras arañaban mis caderas y eso me provocaba una excitación extra. Podía notar mis muslos chorreando; me imaginé que sería por esa cantidad de semen ...
... interminable que sueltan los perros. Sentía mi concha rebalsando de líquido; haciendo ruidos graciosos mientras Bronson me montaba…Yo misma comencé a aullar como una verdadera perra al notar que Bronson me agarraba con más ímpetu, parecía que quería enterrarse por entero dentro de mi vagina. Sentí un placer indescriptible y mi concha pareció llenarse de esa verga canina que había crecido de manera increíble. Yo solamente podía aullar y gritar al tiempo que más leche me inundaba las entrañas.De repente los movimientos del perro se hicieron más rápidos; yo tenía la sensación de que ese bicharraco me iba a destrozar por dentro con su tremenda verga; pero me estaba volviendo loca de gozo…Entonces Bronson se separó un poco de mí, se dio la vuelta y dejó su culo junto al mío. Intenté separarme de él, pero no pude. Estaba enganchada a su verga hinchada y él seguía derramando más semen dentro de mi vagina.Gerardo me acarició la cabeza y me dijo que me quedara tranquila; por un rato permanecería así abotonada a la pija del perro y luego saldría sola.Mientras seguía a cuatro patas, todavía enganchada a Bronson, notando como a cada rato me echaba otra cantidad impresionante de leche en mi vagina; Gerardo me preguntó si podía él darme por el culo.Le dije que entre los dos me iban a matar de dolor y que ni se le ocurriera: Pero entonces noté que se movía sobre mi espalda y enseguida un dolor punzante recorrió mi cuerpo desde mi esfínter.El muy hijo de puta me sodomizó, aprovechando que yo casi no ...