Mi esposa le da el culo a otro
Fecha: 14/03/2019,
Categorías:
Infidelidad
Autor: malsagu, Fuente: RelatosEróticos
Amigos les contare lo que me paso con mi esposa. Esta historia es de la vida real como seria bueno que lo fueran cada una de los que escriben aquí. Mi esposa tiene 24 años de edad, cabello rubio onduladito que le llega a los hombros, delgada de cintura, siempre pechos paraditos y buen culito. En verdad para ser menudita es una mujer delgadita que da la impresión de flaquita apetitosa. Nosotros vivíamos en un poblado pequeño en un departamento de Colombia olvidado. Por cuestiones de la vida a mi esposa le salió un trabajo como profesora en una vereda a 3 horas del caserío. Cada domingo en la tarde se iba para la escuela y regresaba solo los viernes en la tarde. Cada que me quedaba tiempo iba y me estaba con ella en la escuela 2 o 3 días. En la escuela había un apartamentico pequeño para el profesor que le toque trabajar ahí. Así pasaron varios meses de trabajo de mi esposa. Y pasado algún tiempo, Vi, en ella el cambio que iba teniendo poco a poco, en cuanto su forma de actuar de vestir etc., mi esposa era antes muy conservadora y tímida. Pero ahora mostraba un semblante distinto, era mas habladora por ejemplo, sus traje conservadores le dieron campo a las minifaldas, que dejaban ver sus blancas y perfectas piernas, los pantalones apretaditos que dejaba notar su paradito culo, los escotes pronunciados, en muchas ocasiones sin brasier, las punticas de sus téticas se notaba por entre la blusa. Los viernes en la tarde, venían amigas de la vereda para que saliéramos a farria ...
... el fin de semana, todo lo tomaba por el lado positivo, yo que nunca la sacaba a estos sitios era el momento perfecto para darle rienda a la diversión. Mi esposa bailaba con quien se lo solicitaba, díganme quien no quería tomar la cintura de mi esposa, rosarle su verga en la panochita, más, cuando se ponía esas falditas tan provocativas. Un día un borracho descaradamente le cogió el culo y se lo apretó yo disimule que no había visto nada para no entrar en problemas. Pero hubo algo que me parecía mas raro, cuando yo acompañaba a mi esposa a la vereda, la gente me miraba como raro, en ocasiones la gente de la vereda cuando daba la vuelta hasta reían. La cancha de futbol que antes nadie la usaba ahora era mas frecuentada por futbolistas y se estaban hasta tarde. Un día m encontré una amiga, señora que me conocía y me dijo que le pusiera mas cuidados a mi esposa porque hay rumores en la vereda que me dejaban con cachos. Esas palabras quedaron martillando en mi cabeza. Así que el domingo cuando mi esposa se disponía irse para el trabajo me pregunto que si yo iba esa semana para esperarme yo inmediatamente le dije que no podía porque necesitaba todos los días para terminar un trabajo. Me dijo que nos veíamos el viernes en la tarde y se despidió. Pero el plan que tenia era irme tras de ella ese mismo domingo y camuflarme en el monte, para vigilar y salir de dudas. Esa tarde llego mi esposa a la escuela, se quito las botas, se puso un vestido corto y siguió alistando y barriendo el ...