Cogiendo en la casa modelo, la casa abierta
Fecha: 08/03/2019,
Categorías:
Infidelidad
Anal
Autor: Tonyzena67, Fuente: CuentoRelatos
... acomodar las mesas y cosas pesadas. Recuerdo que llegué por Melida en la mañana y ella ya estaba lista esperándome. Vestía un aroma exquisito, con una falda oscura de color gris que apenas le tocaba la rodilla y bastante ajustada y una blusa de color beige, donde se le notaba el sostén del mismo color que le mantenían esos pequeños pechos que deberían quizá alimentar en un futuro, al crio que se le formaba en el vientre. Eso de la falda y por los zapatos que llevaba fue la excusa para asistirla para que subiera a mi camioneta (troca o pick up), pues estaba bastante elevada que prácticamente la tuve que cargar y pude ver en aquel proceso, aquellas hermosas nalgas que son lo fuerte de Melida. En aquel tiempo tenía alrededor de 33 años y un año viviendo en este lado del mundo, y por lo que me di cuenta después, el matrimonio era uno de esos que son simplemente un arreglo para aspirar y llegar a tener una residencia legal en este país. Nunca supe si aquel embarazo era producto de Melida y su falso esposo, o eran los genes de alguien más, la realidad que aunque sabía estaba embarazada, la idea de cogérmela en ese estado fue como un fuerte morbo para mí. Realmente no se le notaba que estaba embarazada y yo no le mencioné que lo sabía, y durante los 25 minutos que nos tomó llegar a la casa modelo, pues le insinué en algo que me gustaba: - ¡Mira que suerte la de tu esposo, que linda mujer tiene! Realmente siento envidia. –le dije y ella sonreía esquivando la mirada. - Sr. Zena, ¿le ...
... puedo hacer una pregunta indiscreta? - Bueno, si a esas vamos, ¿te puedo hacer una yo después? - ¡Está bien! - Dime… - ¿Usted y Kashira son pareja? Ella es una linda mujer y su hijo le llama “Madre” a ella… viven bajo el mismo techo, y usted es un hombre muy guapo, hablando honestamente. ¿No sé cómo no se han atraído mutuamente? Le di una respuesta breve para explicarle la situación, pero luego quería llegar a donde quería llegar y que ella misma me abría la avenida al declarar de una manera trivial que yo le parecía guapo. Eso me dio la pauta: - Melida, ¿de veras te parezco guapo? - ¡Usted sabe que lo es! Por ahí me han contado que usted es un picaflor… - Si tú estuvieras soltera, ¿aceptaras a salir conmigo? - Lo más probable… pero deje de mirarme así, que me pone muy nerviosa. –exclamaba, al sentir que mis ojos se concentraban en ella. - ¡Lo siento! No quiero incomodarte, simplemente que se me hace muy difícil dejar de apreciar tu belleza. ¡Tú sabes que eres linda y muy bella! Por eso envidio a tu esposo… que no daría por tener aunque sea una hora contigo… - ¡Usted está loco! Y no me hable así que me siento muy nerviosa. Veo que cruza los brazos y en su piel de tez clara y con algunos vellos color oro, veo que sus poros se han erizado como si tuviese frio. Melida no me da su lindo rostro, mas va como fija viendo al lado de la ventana. - ¿Tienes frio? - ¡Usted me ha provocado el frio! Me pone muy nerviosa su mirada. - ¿Te causo miedo? - ¡No sé! Pero me pone muy nerviosa. - ...