Rocambolesco
Fecha: 27/12/2018,
Categorías:
Sexo en Grupo
Infidelidad
Autor: PATRI81, Fuente: CuentoRelatos
... sabía porque Carlos le decía a mi marido que tuviese más cuidado con la carretera. Carlos se bajó un poco lo pantalones y se veía su erguido rabo, me cogió como a una pluma me dijo que contra más la mojase mejor para mi culito. A chupar se dijo, un placer para mí. Note como levantaba mi falda y otra vez azoto mi culo de una manera distinta, lo hacía como anoche, con una “saña” especial. Una vez se cansó y notando yo mi culo ardiendo, pero con gusto me hizo colocar entre sus piernas y coloco su rabo en la entrada de mi culo. Parecía que ya se había desacostumbrado, costaba que entrara, pero que sensación tan fascinante y caliente, sentir como todo ese trozo de carne dura, ardiendo, va entrando poco a poco. Veía los ojos de mi marido. Carlos me ordeno ya no fue una petición, que él fuera contando yo a mi marido lo que pasaba. JUAN, COMO SIENTO SU RABO MI AMOR, COMO ME ENTRA, MENUDO PULPO JUAN, ME ESTA METIENDO MANO EN MIS TETAS, QUE ME ESTA “DESTROZANDO” MIS PEZONES DE GUSTO Y COMO ME TOA EL COÑO. QUE HAGO AMOR, QUE HAGO. Y cuando Juan me dijo métetelo del todo, me deje caer y casi me ahogo y Juan dio un volantazo de cuidado, esta vez si lo vi. Ni me movía, como lo sentía ahora, Carlos no se anduvo quieto y empezó a mover su cintura, sacando y metiendo su rabo, muy pronto mi culo se hizo a ese rabo y ya fui yo quien empezó a subir y bajar. Perdí la cuenta de los orgasmos, consiguió que tuviese los que él quiso, domino mi cuerpo hasta el final. Me quite y me fui a comer su rabo, ...
... para sentir como me golpeaban su corrida en mi garganta, que sabía que sería fuerte y abundante. Como así fue. Pero esta vez no lamí todo. Me tragué lo que tenía en la boca y luego moviendo un poco más el rabo de Carlos, salió un poco más de corrida, la recogí con un dedo y le puse mi dedo en la boca a mi marido. Que lo lamio que parecía una ventosa, me puso muy cachonda y se le escapo un gemido extraño a Juan, le pregunte si no seria que se acaba de correr y le me dijo, que ya se corrió hace un rato. Me puso a mil oír que mi marido se había corrido en esa situación. Menos mal que llevaba pantalones negros que si no. De todas maneras, tuvimos que hacer una parada antes de llegar para que se pudiera limpiar todo lo posible. De la comida destacar que estuvo buenísima, que Carlos nos trató con total naturalidad y con mi marido hablaba del negocio común, hablaban los dos con mucho respeto y eso me gustaba. Nadie podía imaginarse nuestra vida ni lo que acaba de ocurrir en el camino. Ya lo he dicho la comida 5 estrellas, lamentándolo no fue lo mejor, lo mejor es ver a las dos tías de la noche anterior y pensar, poneros como queráis, pero me lo he follado yo. El regreso lo hicimos con una mujer mayor, porque habían ocurrido unos problemas de última hora y se los iba contando a Carlos y este le iba diciendo lo que había que hacer. Al llegar a Madrid tuvimos una despedida de lo más correcta y Carlos y Juan quedaron para comer entre semana, ya que seguiría en Madrid y así aprovechaban ...