Infidelidad con mi mejor amigo
Fecha: 24/11/2018,
Categorías:
Infidelidad
Confesiones
Autor: Fannyco, Fuente: CuentoRelatos
... sujeté uno de sus dedos y lo pasé por mi pezón ya erecto por la situación, percibí una ligera respiración entrecortada, yo ya estaba húmeda de las ganas. Luego de ponerlo a jugar lentamente con uno de mis pechos, procedí a deshacerme del sostén y tomé su mano derecha, me llevé uno de sus dedos a la boca y lo chupe por unos minutos, podía ver su boca entreabierta y para ese momento me estaban entrando unas ganas enormes de besarlo, jamás me había sentido así por él, ni siquiera las veces que dormimos juntos, le cuestioné dudosa: -¿algo?-, movió la cabeza en negativa, por lo que me acerqué un poco más a él. Comencé a pasear sus manos por mi cuerpo hasta que me las llevé a la espalda ya un poco arqueada por la posición y bajé lentamente sus manos hacia mi trasero, aún traía puesta la ropa de esa parte del cuerpo, por lo que sólo le apreté las manos en señal de que apretara mi trasero, noté que se lamió los labios un poco, lo tomé por la nuca y lo acerqué a mis pechos, le pedí que abriera la boca y mientras lo hacía coloqué el pezón de mi pecho derecho en su boca, se sentía cálida y deliciosa, es ahí donde procedí a preguntarle: -¿ahora?-, su respuesta fue la misma negativa con su cabeza y yo ya me encontraba muy húmeda y desesperada. Me levanté de la cama y me quité el short de mezclilla quedando solamente con la parte baja del bañador, caminé hacia los pies de la cama e hice que tomara los hilos laterales del bañador con su manos, obedeció y jalé sus brazos para que jalara ...
... los hilos hasta que el bañador cayó en el suelo, lo noté dar un respingo de la cama y esta vez le cuestioné: -¿todo bien?-, movió la cabeza afirmativamente sin articular palabra, pero no me detuvo, tomé su mano derecha y le lamí a lengüetazos su dedo índice, bajé su dedo por mi ombligo y lo dirigí más abajo lentamente. Al menos podría satisfacer un poco el hambre que le traía desde hacía un momento, puse su dedo entre los labios superiores de mi vagina depilada y al instante sentí escalofríos de placer, mi respiración se agitó mientras su dedo resbalaba entre mi clítoris debido a la humedad, me encontraba muy mojada, y todo por él, le pregunté entre gemidos: -¿sientes eso?-, respondió con la voz muy grave afirmativamente y yo seguí masturbándome con su dedo, me acerqué a su oído y le susurré entre jadeos: -¿seguro que nada?-, finalmente soltó un suspiro entrecortado que me supo a que lo estaba reteniendo. Me abalancé sobre sus piernas con mis piernas abiertas, me acomodé bien para sentirle, y aunque esperaba más dureza en su entrepierna, no me di por vencida, comencé a moverme para provocarle, seguí con mi rutina por un par de minutos cuando empecé a notar su respuesta a mis movimientos, sentía su miembro endurecerse en cada movimiento, se sentía bastante grande, comenzó a aferrar sus manos a mi cintura y llevó su frente hacia mis pechos, aproveché para quitarle el pareo de los ojos, y entonces levantó la cabeza y me miró, tenía sus ojos muy abiertos, sus pupilas se hicieron ...