Tres primas, tres pitbulls - Relatos Eróticos

Tres primas, tres pitbulls

... salieeendo el nuuuudo. , Mmmmmhhh. !!!"". , y jalando un poco más hacía parecer que esa vagina iba a explotar de tan hinchada que se veía hacia afuera. , hasta que al parecer Andrea pujó y el aire que estaba dentro pasó por su estreches para afuera inflándose el extremo que papá tenía agarrado. , luego el se vistió y salió corriendo, solo 3 ó 4 minutos antes que yo llegara. Fue extraño verme llegar a mi habitación y ver en aquel visor lo que hace pocos minutos acababa de vivir. , luego conversé con mi prima que me corroboró que todo no había sido tan grave, que más que sentirse ultrajada le había molestado el modo mismo, el chantaje la extorsión y de mi parte que no le hubiese contado lo que me había ocurrido a mí con el depravado de mi padre. , pero todo quedó en nada y acordamos que dejaríamos la cámara de papá dentro de su velador pero sin la tarjeta de memoria para que supiera que nos dimos cuenta que nos estaba grabando, también remendé mi peluche de panda para que no la volviera a meter ahí. Le pregunté a Andrea que cómo sintió el condón inflado dentro de su vagina, y me respondió que algo raro, la presión en la salida era muy similar pero adentro era otra cosa, si bien ocupaba toda capacidad de la vagina y el pene de los perros no tanto, no tenía la dureza y temperatura de ellos, tampoco esos incesantes y calientes chorros de ...

... semen. , en definitiva algo distinto pero ni la mitad de rico. Llegó el fin de semana y el sábado fuimos a la piscina, no faltando las impertinencias de papá para con Andrea, en que entre juegos en el agua le dio algunos agarrones en nalgas y senos, así como también unas refregadas de pene por atrás, pero no pasó de eso y ella con su seño fruncido lo mantuvo a raya, . Después el domingo fuimos al Mall, estando casi todo el día ahí y cuando íbamos de vuelta a casa ya que nos quedaba en el camino pasamos a buscar a Maggi, la que no dudó en insistir en ir con Feff, aunque le decían que no porque ya había 2 perros en casa, hizo pataleta hasta que mis papás y los suyos terminaron por aceptar. , bueno más que nada porque los estábamos sacando a pasear todas las noches y así en el día estarían más relajados. Llegando a casa se encontraron los tres hermanos y jugaron como tales. , pero ese par de días sin sexo tenía muy ansiosos a Will y Ricky que se fueron directo a husmear en nuestras entrepiernas mientras Jeff recorría el patio reconociéndolo. , Maggi nos miró extrañada por tanto cariño de nuestros perros y antes que preguntara nada le dijimos que habíamos estado casi todo el fin de semana fuera de casa y ellos nos echaron de menos. Era tarde para sacarlos a pasear, por lo que solo les dimos alimento y nos retiramos al interior de la casa.