1. Un enmascarado en la casa


    Fecha: 09/10/2017, Categorías: Anal Sexo con Maduras Tabú Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    ... tanga y fueron bajándolos lentamente; haciendo rozar intencionadamente la suave tela contra mis muslos. Dejó la tanga a la altura de mis rodillas y acercó su nariz a mi pubis.La hundió entre mis labios externos y aspiró mi aroma.Un dedo los separó más y sentí su lengua invadiendo mi vagina.Volví a morderme para no gemir y no darle el gusto a ese tipo de verme gozar con sus caricias. El hijo de puta me estaba obligando a tener sexo con él y a mí eso me estaba calentando de una manera tremenda…Al sentir su lengua en mi raja, los pezones se me endurecieron como piedras. El tipo lo notó y sus dedos reptaron por mi cuerpo para acariciar esos botones rosados y endurecidos.Entonces ya no pude aguantar más. Arqueé mi espalda y aullé como una perra, mientras el más intenso de los orgasmos recorría todo mi cuerpo…El enmascarado sonrió, sin dejar de lamer mi concha.“Apenas te toqué, nena y ya estás acabando como una perra…”Sentí un escalofrío, junto con una nueva oleada de placer.“Te gusta, perrita… te guste que te chupe la concha así…”Tenía razón ese turro; mi concha cada vez se empapaba más y más, mientras esa lengua insistía cada vez más adentro mío.Unos segundos después ocurrió algo inevitable: un nuevo orgasmo me recorrió de punta a punta, dejándome muda y temblando…Cerré los ojos, disfrutando de los últimos estertores de mi orgasmo. Pude entonces oír el sonido de una cremallera abriéndose.Al abrir los ojos, me encontré frente a una tremenda tranca gruesa y ya endurecida. El ...
    ... glande ya estaba empapado y brillante.El hombre entonces se puso a horcajadas sobre mi pecho y acercó su verga a mis labios. No necesitó ordenarme que abriera mi boca; lo hice yo sola…Comencé a comerme su pija despacio, disfrutando cada centímetro, cada pliegue de esa cosa magnífica. El tipo se reclinó hacia atrás y comenzó a suspirar y gemir despacio. Luego estiró sus dedos y volvió a acariciarme el clítoris; provocándome un placer inusitado….De repente el hombre sacó sus dedos de mi concha y su mano me tomó por la garganta, apretándome como si quisiera estrangularme“Ahora vas a pedirme que te coja bien duro, putita…” Me amenazó.El muy turro sabía que eso era lo que yo necesitaba.Realmente quería eso; que me cogiera bien duro. Me quitó la mordaza de la boca. Y se lo pedí, con voz ronca de pura excitación. Se lo pedí, le rogué; se lo supliqué casi llorando; sin poder apartar mis ojos de esa tranca enorme..."Te gustaría esperar a tu marido para que te coja…?”“No, ya no puedo esperar más… la quiero ahora”. Dije llorando.Al tipo le alcanzó con eso y me tumbó otra vez sobre la cama.Yo abrí mis piernas al máximo y él se acostó entre ellas.Mordió mis pezones bien erectos, provocándome algo de dolor,Me apretó mi culo duro y me acarició el clítoris una vez más…Entonces me hizo flexionar una pierna y, antes de que pudiera darme cuenta, me penetró de un solo embiste. Mi grito inicial fue más de dolor que de placer; al sentir esa gruesa verga tratando de abrirse paso a través de mi vagina ...