1. En Bilbao


    Fecha: 04/09/2018, Categorías: Infidelidad Autor: murgis, Fuente: CuentoRelatos

    ... de forma muy tranquila. La acariciaba de arriba hacia abajo mientras todos seguían hablando y riendo y aunque entre ellos se daban cuenta de lo que estaba pasando con mis nalgas nadie hablaba al respecto, sino todo lo contrario, me imagino que no decían nada para que nadie del resto de los pasajeros se percatara de la situación. Estaba yo súper excitada mi chocho estaba empapado más de lo que normalmente lo tengo, aquél extraño puso uno de sus dedos entre mis nalgas pero sobre la falda. De inmediato y sin decir nada más subió mi falda hasta mi cintura y nuevamente me empezó a acariciar nuevamente las nalgas, pero ya sin falda, solo encima de las pantimedias. Creo que no pasaron ni 5 minutos cuando ya no era una mano, ya eran muchas las que estaban sobre mis nalgas, sobre mis piernas y un dedo jugando sobre las pantimedias tratando de meterme un dedo y acariciar mi pipa, incluso por momentos sentía un poco de molestia por la costura de las pantimedias, pero era más lo cachonda que estaba, que no pensaba en nada más. Yo tan caliente que sentía que me ponía roja no solo de vergüenza, sino también de excitación. Finalmente lograron romper las pantimedias por la parte de atrás hasta la cintura. Sentí morirme de caliente y me sentía la más puta del mundo en ese momento cuando sentí un dedo queriendo entrar en mi coño. Hábilmente abrí un poco las piernas tratando de ayudar a que ese dedo entrara en mí sin dificultad; ya me estaba corriendo de los masajes que me había dado en la ...
    ... pipa. Metió sin dificultad no solo uno, sino creo que hasta dos dedos, pero creo que no fueron los únicos dedos que entraron. De momento perdí la cuenta de los orgasmos que tuve. De repente sentía algunos dedos muy largos y otros muy anchos. Pero el que sí sentí más rico fue el dedo que logró tocar mi pipa y era precisamente el dedo del chico que venía frente a mí. Hubo un momento en que por tanta excitación, tuve que cerrar los ojos y creo haberme perdido como dos o tres minutos, entonces cuando reaccioné un chico traía ya una bolsita rota de un condón. De repente todos se juntaron y se acomodaron de forma tal que uno de ellos quedó detrás de mí, abrazó mi cintura con uno de sus brazos y con la otra mano dirigió su polla hacia mí coño, incluso yo ayudé moviendo mi cuerpo un poco hacia arriba, como poniéndome de puntitas para facilitarle el trabajo. De una sola estocada me la metió. Para ser sincera fue uno de los orgasmos más ricos que he tenido en mi vida. Pensé por un momento en tantas cosas y en resumidas cuentas, era algo extraordinario lo que me estaba pasando; primero estaba siendo follada por un desconocido, en un lugar público y con mucha gente a mi alrededor que me estaba viendo, fue un momento único. Y mientras estaba siendo follada y gimiendo levemente, el chico de enfrente no dejaba de tocarme la pipa, lo mire fijamente a los ojos; no sé qué cara iba haciendo yo, solo imagínense, una cara de puta seguramente. El chico que me acariciaba la pipa me dijo que me veía ...