En una noche lluviosa a bordo de un autobús - Relatos Eróticos

En una noche lluviosa a bordo de un autobús

... ya muy excitado nuevamente, baje mi ropa y mi mano la puse sobre su pene para sentirlo, y guauuuu vaya que lo tenía enorme! Ahora fui yo quien se agachó para mamarle ese juguetito! Con mi lengua le recorrí en círculos la cabeza de la verga hasta que el tipo me jalo y me hizo voltearme quedando mi culo a su disposición, lo acomodo en la entrada y comenzó a empujármelo! En cuanto entro, y por la posición en que yo estaba, sentí un agudo dolor en mi culito, pero no podía quejarme, por temor a ser escuchado, así que me aguante. El tipo continúo con sus embestidas y poco a poco sentí que ya era rico muy rico. Su pene ya estaba totalmente dentro de mis intestinos, casi lo sentía en el estómago entonces muy hábil el tipo agarro mi verga y comenzó a masturbarme al mismo ritmo de sus embestidas. Vaya si era buen matador! Así me tuvo un buen rato, rato que yo deseaba que no terminara, hasta que yo comencé a eyacular en su mano y el dentro de mi culo! Me saco la vergota y sentí como un hueco en mi ano quedo abierto, luego me dio papel higiénico me limpie los restos de semen que habían quedado en mi ropa y con otro pedazo lo puse como tapón en mi culo. Nos acomodamos la ropa y sólo nos veíamos fijamente, el tipo me dijo al oído: como machito coges muy rico, pero como jotito coges mejor! Tienes un culito muy sabroso. No sé ni quiero saber nada de ti, quiero que siempre nos recordemos como amantes fugaces. Está bien le dije. Lo abrace y nos besamos casi media hora, no hubo necesidad de palabra alguna, todo estaba dicho y concluido. En la siguiente terminal el bajó y nos deseamos lo mejor. Como olvidarte mi amado y amante fugaz? Te volveré a encontrar algún día? Alguien me hará olvidarte? No lo creo.