1. Seducido por una estudiante de noveno año


    Fecha: 09/07/2018, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... yo me quedé estupefacto, he orientado a muchos en temas sexuales, pero en ese momento no tenía respuesta, luego la pequeña Sheila continuó preguntado -y que los chicos le besen la cuquita a las chicas, es malo eso??-, -a usted le chupan el pene profesor? y usted ha besado alguna cuquita?-, me quedé mudo totalmente. Solo atiné a decirle -no, no creo que sea malo!- y cuando iba a explicar, sonó el timbre que anunciaba el final del receso, ella se despidió y por primera vez lo hizo de beso y me lo dio en la boca. Yo ese día, confieso me tuve que masturbar después de muchos años. Cierto día, estaba yo en mi cubículo, en eso tocaron la puerta, no había receso aún, era horario de instrucción, abrí y era Sheila, entró rápido y me dijo que se había escapado de una de las clases, donde llevan laboratorio, le dije que debía regresar, pues no era correcto eso, pero ella me suplicó que la dejara estar conmigo, asi que acepté. Nuevamente se subió a mis piernas, eso me encantaba ya, mientras yo le explicaba algo, ella me interrumpió y me dijo -profesor, puedo yo besarle su pene?-, yo hice como si me escandalizaba, pero tuve una erección enorme en ese segundo. -Como dijiste?- le pregunté. -Sí, usted me dijo que no es malo y yo quiero probar con usted, si porfa, porfa- decía la pequeña Sheila. -Es que eso solo se hace con la persona amada!- le expliqué. ella se quedó en silencio unos segundos y me dijo -es que yo lo amo a usted- Luego ella se bajó de la silla, es decir de mis piernas, y ...
    ... agachándose se puso a bajarme el cierre del pantalón, yo pude haberme opuesto y sacarla de alli, pero no lo hice, ella quitó los cierres y yo aún la ayude bajándome el pantalón y sacando mi verga que estaba bien parada, -uyy que grande la tiene profesor-, entonces ella comenzó a darle besitos y más besitos, que yo sentí de maravilla, pero le dije que la chupara también, asi que ella además de besos y lamidas, la metía en su boquita y chupaba como si fuera un caramelo. Yo quería que nunca terminara esto, a pesar de su poca práctica, sentí que fue la mejor mamada que me habían dado en mi vida. Los quince minutos que estuvo la pequeña entre mis piernas las sentí unos pocos segundos, saqué liquido preseminal, pero ella lo succionó todo. En los últimos minutos ellas me hizo gemir de gusto. Finalmente el timbre de cambio de periodos de clase me volvieron a la realidad, no pude eyacular, pero faltó tan solo un minuto para hacerlo. Luego hice lo que jamas pensé hacer, cuando tenía periodos libres, le decía a la pequeña que se escapara para que llegara conmigo al cubículo, o bien la mandaba a traer, era un obsesión como una adicción. Primero la ponía a chuparme la verga y pronto la hice tragarse mi lechita, a ella le gustó hacerlo. No dejaba ni una gota. Luego le dije que ahora me gustaría besarle su cuquita, ella se alegró y me dio un beso que yo correspondí. La puse sobre mi escritorio y le quité las braguitas blancas, le abrí las piernas y ella tenía un rajita con escasos pelitos ...