El padrastro de Alex (5) Violación
Fecha: 29/09/2017,
Categorías:
Gays
Fetichismo
Autor: ZLAZKO-KAI, Fuente: CuentoRelatos
... postura tumbándome bocarriba en la cama. Me ataron de pies y manos estirándome en cruz, y dejando mi culito bien abierto y desprotegido. Yo sabía que me tocaba otra vez recibir, que comería pollas hasta que se hartara mi culo, y se quedaran los cabrones satisfechos. A partir de ese momento, uno tras otro, empezaron a follarme el culo. Juan fue el primero en taladrarme el boquete, aquella gruesa polla entró rompiéndome en dos el ano, abriéndose camino y destrozándome por dentro. No podía chillar, el placer era más fuerte que el dolor al sentir su pollón follándome, y abriéndome el culo como un puto macho. Era muy vicioso ver a los demás tíos, alrededor de la cama animando a mi violador, y alentándolo a que me la metiera más rápido y más adentro. Juan: Asiii… Toma pollón gordo y bueno… ¡Ohhhh!... ¿Estás disfrutando eh chaval? … Pues trágatela maricón… Tragaaa... ¡Siiii!… ¡Uffff... me corroooo!... ¡Me corroooo!... ¡Ahhhh! Con el ano bien cargado y repleto de leche, Armando fue el segundo en envergarme el pollón, y empezar a tirarse mi maltratado culo. Lo tenía súper duro, me apretaba con él las paredes anales, y aunque mi esfínter estaba muy dilatado y abierto, la presión que ejercía el niñato bombeando me volvía loco de placer. Pocos movimientos bastaron para que se corriera pronto en mi ojete, y me dejara dentro una buena ración de cremoso semen. Los goterones de esperma se me escapaban del ano como un rio, cayendo sin remedio en las sabanas, mojándolas y dejando un olor ...
... ácido. Seguidamente le tocó el turno a Diego, el cabrón estaba excitadísimo, empujaba la polla con tanta fuerza dentro de mi ano, que del impulso me levantaba y me bajaba las nalgas con cada embestida que daba. Cuando las envergadas se hicieron más violentas y rápidas, intuí que el niñato se correría en cuestión de segundos, así que cerré el boquete del culo presionando fuertemente su polla, y se vació dentro mi pegando gritos de placer. Por último me folló Paolo, que me soltó la lechada mientras me comía la boca, y detrás Lucas, que después de unos buenos pollazos se corrió en mi recto, y acto seguido se agachó delante de mi ano, y comenzó a chupar todo aquel esperma que llenaba mis entrañas. La boca del mamón era una aspiradora, absorbiendo de mi ano hasta la más pequeña gota de leche, que me habían regalado cada una de sus pollas, y que él puto vicioso no estaba dispuesto a desperdiciar... a tragar se ha dicho. Al mismo tiempo me masturbaba muy rápido la polla con su mano, mientras su sobrino Juan había sentado su culo encima de mi boca, y me obligaba a volver a chupárselo. No tardé mucho en soltar varios chicates de leche caliente, que llegaron hasta mi pecho, las nalgas de Juan, y el resto se quedó mojando la mano de Lucas. Después me desataron y me llevaron en volandas hasta el cuarto de baño, y me dejaron dentro de la bañera. Todos se pusieron al rededor y empezaron a mearse encima mía, mojándome de orina caliente todo el cuerpo. Cuando terminaron de escurrirse las últimas ...