amigos, o mas? - Relatos Eróticos

amigos, o mas?

el sol me despierta con sus primeros rayos sobre mi cara, me giro y todo me da vueltas, intento incorporarme pero apenas y puedo abrir los ojos, el resplandor del sol sobre el agua del mar me deja cegado mas de lo que me ha dejado el alcohol de la noche anterior mi cuerpo cubierto de arena consigue moverse lentamente y a tientas siento junto a mi su cuerpo también cubierto de arena, usando solo un par de shorts cortos de mezclilla negra desabotonado y con la bragueta a medias, dejando ver sus boxers mal puestos y una pelvis plana con un ligero tapiz de vello recortado; luchando contra el resplandor del sol abro los ojos y lo veo tumbado en la arena, inconsciente y apenas respirando, su piel morena emblanquecida por la arena que lo cubría, y entre tanta arena apenas descubro el rostro de Cían; junto a nosotros el par de botellas casi vacías de etiqueta negra que nos han dejado sin memoria. vuelvo la mirada al mar intentando recordar pero todos los recuerdos son tan borrosos e intermitentes que solo consigo un dolor de cabeza mas fuerte. hace un año y siete meses que llegue a vivir a Playa del Carmen, aburrido de la monotonía y del ruido de la ciudad salí buscando aventuras y experiencias nuevas, quería una nueva vida; soy Ruy y a mis 25 años no había siquiera conseguido salir de la casa de mis padres, hasta ese momento, y no basto mucho para empezar a ver los cambios en mi vida, a los pocos meses me veía mas maduro y centrado, física y mental mente, el cambio me había ...

... sentado realmente bien. A los tres meses de haber llegado conocí a Cían a través de Lucero una amiga que conocí al llegar; Cían, un chico carismático de apenas 18 años quien había peleado con su padre y Lucero le daría alojo unos días en su piso, al principio apenas y note su presencia era un niño para mi, además hetero, realmente no movió nada en mi; ese día salimos de copas a la playa y al caer el sol fuimos en busca de un Bar para refugiarnos y seguir el momento, con Lucero me llevaba bien pero Cían resulto una sorpresa, era carismático, extrovertido, hiperactivo, buen gusto de lectura y pensamientos tan locos que me contagiaba. Entre copas me pidio que lo acompañara a comprar un cigarro y la platica nos llevo a hablar de tantas cosas que desde ese punto sentí el click que uniría la amistad. Al tiempo Lucero se fue a vivir a un puerto cercano, y yo comencé a buscar salir con Cían mas a menudo, buscando mil pretextos, salíamos a correr, al cine, tomar café, a nadar fuera a la playa o cualquier cenote, era una buena amistad, engranábamos bien; yo salia también sin el buscando lo que Cían no me podía dar, por que yo poco a poco dejaba de verlo como amigo, comenzaba a gustarme, pero no quería dañarme a mi mismo con una relación imposible, yo no quería volver a tratar de convertir a un hetero ya había pasado esa etapa ya había dejado esa parte de mi vida atrás. cuando charlábamos el me platicaba de su novia y de algunas de sus relaciones, y yo también un poco de mis experiencias, ...