María José me resulta muy atractiva - I -
Fecha: 30/04/2018,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... copa, pero al estar tomando la segunda copa en otro garito y estando yo charlando con otro amigo y su marido miré hacia el grupito donde se encontraba ella como quien no quiere la cosa, y de repente la veo a ella mirándome fijamente, al instante dejé de mirar (después de lo de la ultima vez. ), pero picándome la curiosidad al poco volví a mirar disimuladamente y , allí estaba María José otra vez mirándome fijamente. Esta vez no aparté los ojos de ella y la respondí desafiantemente clavando mi mirada en la suya, al cabo de un buen rato esta vez fue ella la que la apartó, estuvimos un buen rato jugando a este juego, yo estaba totalmente empalmado, no podía remediarlo, y sólo con la mirada de Maria José (que sería de llegar a pasar algo más allá de una sencilla mirada). Así continuo el juego durante un buen rato (yo mientras disimulaba de vez en cuando con su marido y el otro amigo diciendo alguna bobada y riéndome ocasionalmente). Después María José se acercó al grupo donde nos encontrábamos nosotros, yo me desligue de su marido y el otro amigo y me acerqué más a ella y la mujer del otro amigo para bailar un poco, después de reírme unas cuantas gracias María José se colocó a mi izquierda pegándose con disimulo, yo acerque mi codo a su teta y ella lo aceptó sin apartarse ni un ápice, todo lo contrario, era ella la que se acercaba más a mi y me rozaba con sus tetas que tanto me maravillan, y así estuvimos todo el rato, yo no cabía de gozo, me ponía la polla durísima y hasta ...
... llego a creer que me corrí solo de sentirla y olerla. Sus tetazas me vuelven loco y no podía desaprovechar la situación de que María José se las dejara tocar disimulando, nos pasamos más de una hora en esta situación hasta que nos fuimos. Ya al despedirnos todos nos besamos y nos emplazamos a vernos de nuevo en otra ocasión, fue cuando al mirar de nuevo a María José la encontré mirándome otra vez a los ojos y sonriendo otra vez con descaro (y esta vez ella al lado de su marido), yo le correspondí con otra sonrisa como diciendo: _ ¡hasta otra!, y nos despedimos Aquella noche no recuerdo cuantas pajas me hice a costa de María José, no se me iba de la mente lo que había sucedido, no podía dejar de pensar que me podía follar a la tía que más había querido follar en toda mi vida (aunque fuera la mujer de un amigo). Pero nunca pasó nada, fue pasando el tiempo y desde aquello casi no ha habido ocasión de juntarnos, hasta que el otro día tomando un café a media mañana, oigo. _ ¡Buenos días! Levante la cabeza para ver quien era. era María José _ ¡Vaya!, ¡cuanto tiempo! (le respondí y le di dos besos dejando el periódico que estaba leyendo sobre la barra) _ Sí, hace mucho,. como ya no nos reunimos. -dijo ella sonriendo- _ Es verdad _ ¿Me invitas a un café? _ Claro que sí, no faltaría más. Ella dejó su bolso sobre un banquete y yo le pregunté que como quería el café. En aquel momento la examiné con un vistazo, llevaba una falda con un poco de vuelo por encima de la rodilla y una camisa con ...