Vacaciones en Merlo 2 - Segunda parte
Fecha: 18/04/2018,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Gabriel B, Fuente: CuentoRelatos
... la espalda otra vez. Él le besó el culo, le dio una nalgada, y la penetró de nuevo. Seguía igual de duro que la roca en la cual se sostenía. La hizo acabar dos veces más. En un momento, una familia se acercó bastante a ellos. Desde donde estaban sólo podían verle el rostro. Pero su gesto era muy delatador, así que en seguida se fueron. -Acabame en el culo, quiero sentir los chorros de tu leche caliente. -dijo Sofía. Calculaba que habían pasado al menos una hora y media desde él la estaba montando. Nahuel se masturbó detrás suyo. De su garganta brotó un gemido que iba in crescendo, a medida que el semen se disparaba con fuerza increíble. Cinco chorros abundantes bañaron el culo de Sofía, y se chorreaban, hasta caer en el agua. Comieron en silencio, unos sándwiches que habían llevado en su mochila. Durante ese tiempo se trataron como novios, dándose besos, y acariciándose todo el tiempo. Él la tumbó en el piso, e hicieron el amor de nuevo. Pero la tarde se terminaba. Debían volver al hotel. A medida que se alejaban de Pasos Malos y se acercaban al centro de Merlo, la expresión de Sofía se ensombrecía más y más. Debía volver con su novio Maxi, y mirarlo a la cara sin que sospeche nada. Lo primero que haría sería meterse en la ducha. Se había bañado en el arroyo, pero todavía sentía en su lengua el sabor de Nahuel, y su piel desprendía olor a sexo. Esa noche estuvo especialmente cariñosa con Maxi. Se sentía culpable y decepcionada de sí misma por lo que hizo. Aunque no se ...
... arrepentía. Deseaba que los días pasen rápido, y que no se encuentre a Nahuel de nuevo. Pero el tiempo pasó lento, y fue torturante. En una ocasión Maxi la escuchó llorar mientras ella estaba en el baño, pero le dijo que no era nada, sólo estaba sensible por estar en un lugar tan hermoso con el hombre que ama. En unos días conocieron los lugares más importantes de Merlo. Llegó la última noche, y decidieron ir a cenar al casino, donde luego perdieron algo de plata apostando. Cuando volvieron al hotel fueron a la pileta, y después se sentaron en las mesas que estaban en el corredor, para disfrutar en mutua compañía los últimos momentos de sus vacaciones. Y entonces llegó Nahuel. Había vuelto de un restorán donde brindaban un show de folclore. -Mirá quien está acá. – dijo Maxi, alegre. – Vení, sentate con nosotros que mañana ya no te vemos más. Sofía no podía creer su mala suerte. Pensaba que se había librado de él, pero justo en el último momento, apareció de nuevo. Charlaron sobre banalidades un buen rato. Ella estaba nerviosa. En un momento, sintió los dedos de Nahuel deslizarse en su pierna, por debajo de la mesa. Su descaro la indignó, pero muy a su pesar, se sentía excitada. Pero luego Nahuel hizo algo insólito. Se inclinó, y le dio un beso en la pierna. -¡Qué haces! –exclamó. Luego miró a su novio. Estaba colorada, y nerviosa. Maxi seguía sonriendo como si nada hubiese pasado. No puede ser tan idiota, pensó Sofía. Entonces Maxi la sorprendió dándole un beso, exactamente en el ...