Costumbres tribales
Fecha: 31/03/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... aparato, y le pego un polvo cojonudo, la clavada duro bastante, y la doctora debio correrse tres veces. La corrida del tio fue bestial, derribando a la doctora, que dio con las tetas y la cara en el suelo. Cuando el tio se salio, el coño de ella permanecio abierto un momento, por lo que habia tenido dentro. Vi como algunos chicos empezaban a ofrecer su culo. A mi me vino uno que tendría 18 años o asi, y se me puso delante, tambien a cuatro patas, ofreciéndome un ojete y dejando ver su colita y sus huevos sin pelos colgando. Vi como mi hijo era requerido tambien por otro chico de unos 22 años. Tenia la polla pequeña, pero unos huevos enormes. Seguro que lo iba a dejar lleno de semen. El chico fue cuidadoso con el. Le trabajo un rato, mientras el rabo de Pablo se le veia entre las piernas totalmente endurecido de nuevo. Lo fue follando despacio, cosa que no evito que su cara hiciera muecas de dolor continuamente. Aguanto bien la follada, aunque perdio la erección, imagino que como consecuencia del dolor. La fiesta termino muy tarde, y mis hijos ya no vinieron a dormir a nuestro campamento. Se quedaron en la aldea, y al dia siguiente, cuando fui a buscarlos, los encontre durmiendo abrazados. Marta tenia el coño muy dilatado, con abundante esperma seco manchandolo por fuera y por el interior de las piernas. El pene de Pablo estaba como irritado, y su culo tambien aparecia con rastros de semen seco. El dia de la despedida llego y tuvimos que hacer las maletas para volver a la ...
... civilización. La despedida fue brutal, con una gran fiesta que siempre recordaremos. En el viaje pacte con la doctora y con el indígena que esto seria un secreto entre nosotros. Antes de salir el indígena que nos acompañaba nos dijo que iba a volver con la tribu, que no tenia familia y que solamente volvia para arreglar algunas cosas burocraticas, pero que se volvia con la tribu sin dudarlo. Mi relacion con mis hijos cambio radicalmente. Pasamos a ser una familia mucho mas abierta. Seguimos durante mucho tiempo follando entre nosotros tres. No lo habiamos pensado, pero la noche que volvimos a casa, y estando yo ya en la cama, mi hija vino a mi cuarto desnuda. Actuo como hacian los de la tribu, dejándome claro que queria follar. Habia adoptado su forma de actuar. Se sento en la cama con las piernas abiertas y tocándose el conejo. Yo me destape, dormia desnudo, y deje mi rabo a su alcance. Lo agarro y empezo a mamarmelo, dedicándome una de las mejores mamadas de las que he disfrutado, y se puso a cuatro patas delante mio, ofreciéndome su conejo. Yo le dije que habia tambien otras formas de hacerlo, que tambien daban mucho gusto, ya que solamente habian follado a cuatro patas o en la postura del misionero. Le dije que se sentara encima mio, controlando ella la clavada. Asi lo hizo, metiendose mi carajo sin ninguna dificultad. Empezo a moverse arriba y abajo, disfrutando del gusto que le daba controlar ella la velocidad y la profundidad de la follada. Asi estabamos cuando Pablo ...