1. Mi joven amante (M47 - H19)


    Fecha: 17/07/2024, Categorías: Confesiones Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... la cabeza, pequeñas chupadas en el glande, luego lengua y mucha saliva para después meterla totalmente en mi boca dándole una rica mamada, sentía sus manos tratando de hacerme una coleta para sujetar mi pelo, yo chupaba gozando cada centímetro de el, su sabor algo salado, sentía como se movía y se estremecía por momentos en que mi boca estaba dentro o succionaba la punta de su sensible glande, gruñidos y gemidos que salían de su boca y que me excitaban y prendian aún más... Así estuve disfrutando de su pene, sus pequeños testículos y la sensibilidad de su glande que le volvía loco que chupara...
    
    Ven... Me decía, ya te la quiero meter, ecuché que me decía, me limpie la boca de saliva y obedeci... Volví a acostarme boca arriba, vi cómo abría un preservativo y lo colocaba rápidamente, abrí mis piernas y el sujetándolas las alzaba acomodándose para penetrarme, algo torpe debo decirlo sin poder hacerlo hasta después de 2 intentos y mis manos tuvieron que ayudarle a guiar el camino... Estaba tan mojada que al entrar se deslizo fácilmente, acto seguido un fuerte movimiento de sus caderas penetrandome, sus manos sosteniendo mis algo gordas piernas y luego abrazándose a mi y cogiendome con mucha rapidez y mucha lujuria, gemidos y gruñidos que salían de su boca, mis manos acariciando la espalda de este jovencito y mis piernas abrazándolo mientras más rápido y con más ganas me cogía, nuestros sonidos se mezclaban, su sudor me goteaba en la cara, su rostro inocente que conocía se ...
    ... transformó en uno lleno de morbosidad y lujuria...
    
    Era hora de mi posición favorita y el como si hubiera leído mi mente ya estaba listo, me acomode en la cama en posición de perrito como me dijo que quería ponerme, empinada y con mi cara recargada en la almohada sentia sus manos mis caderas, pasándolas por mis nalgas y sintiendo sus dedos acariciando entre ellas... Su pene entro y mientras sentía sus manos aferradas en mis caderas se escuchaba el chocar de su piel con la mía, embestidas fuertes y lentas que pasaban a una intensidad bastante rápida... Mi cara se hundía en la almohada gimiendo de placer. No esperaba menos de el... Esa pasión al cogerme, ese deseo al sentir sus embestidas, sus gruñidos y gemidos de placer, era tanta la energía que de el provenía que sentía que ya no podía más pero el no se detenia... Un ritmo más lento de el y de manoseos en mis nalgas comenzó, nalgadas que sonaban fuerte y que quedaron marcadas en mi piel blanca, me abrazaba por la espalda, pasaba sus manos fenano sintiendo mis pechos y pellizcando...
    
    Ahhh ya.. ya, me decía... Saco su pene de mi y pude recuperar el aliento, me quedé recostada boca arriba, luego lo sentí a el tocando mis nalgas para después quedarse recostado conmigo, volteo a verlo y veía en el un placer y gozo enorme, se acercó a darme un beso y me decía que quería continúar... Caray, yo solo me rei en ese momento no pude evitarlo, yo estaba molida en la cama, desnuda sin poder sentir las piernas y el ya estaba listo para ...