1. Un sábado por la tarde


    Fecha: 19/09/2017, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Era un sábado por la tarde, cuando aprovechas para hacer todas las cosas personales que durante semana no logras realizar por las demás actividades, comencé con muchos deseos de realizar los pendientes que tenia acumulados, calcule que saldría con todo antes de que viniera a casa. Al caer la tarde y sentir que casi llegaba la hora en que había quedado de visitarme comencé a arreglar la mesa, deseaba pasar una tarde a su lado, romántica y apasionada, siento que el sentimiento en una relación es primordial, para lograr una satisfacción plena como pareja. Coloque velas, una buena botella de vino, dos copas, y una exquisita cena, corrí a ducharme, puse muchisimo esmero en mi arreglo personal de ese día, deseaba que me viera preciosa, y deseable, como siempre trato de estar. Tome mi ducha con esencias aromáticas, puse cuidadosamente perfume en mis pezones, y en ciertas partes de mi cuerpo que el suele besar, para que mi olor lo excitara mas. Compre una braga para esa ocasión, negra, de encajes, dejaba ver maliciosamente, la conchita que tanto le gustaba, el sostén de igual color y de encajes también dejaba ver los pezones que al pensar en la proximidad de mi amor se iban poniendo cada vez mas duros, el vestido que me puse era negro corto, muy pegado al cuerpo, me puse unas sandalias negras altas y me decidí a esperarlo escuchando música, paso media hora, luego 45 minutos, pense que estaba poniéndome ansiosa y que tendria algún atrazo, cuando sonó el teléfono y era el diciéndome ...
    ... que tenia una reunión con un grupo de amigos y que no me vería hasta el día siguiente, me enfade y se lo hice saber, pero aun así, no desistió de sus nuevos planes, frustrada decidí no extrañarlo, algo en mi me decía que llegaría, decidí hacerle un juego que lo hiciera nunca arrepentirse de haber cancelado su nueva cita.... Apague las luces y la casa quedo en penumbras pero a oscuras quite mi vestido y lo coloque sobre la mesa, camine un poco mas me quite las sandalias y las puse ambas a poca distancia una de otra, me quite el sostén y coloque en la manecilla de la puerta de mi dormitorio, y mi braga quedo tirada en el piso antes de llegar a la cama, me acosté y poco a poco me quede dormida. No sentí cuando entro pero lo éxito encontrar el vestido en la mesa y tomo mi prenda entre sus manos junto con las copas de vino y siguió la pista que le había dejado hacia el placer que tanto deseaba darle... Sentí sus labios en mis piernas que me hicieron cosquillas en mi ser, seguí boca abajo, sus manos subían por mis piernas mientras su lengua recorría la redondez de mis pompis, fue abriendo maliciosamente mis piernas tratando de acariciar mas cerca de mi conchita que comenzaba a palpitar, mis sentidos estaban despertando ante la sensación de sus caricias, que delicia, sus mágicas manos recorrían mi espalda suavemente, sintiendo la tersura de mi piel, me hablo al oído y me dijo que estaba ahí para amarme, me di la vuelta y el parado frente a mi comenzó a quitarse la camisa, mientras lo ...
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